Tres años atrás, Bernat Cot y Laura Aubert estrenaban Els secundaris en el teatro Maldà, una de las dos obras que la compañía Els Pirates montaron en el año 2022 para celebrar su 20.º aniversario. Cot y Aubert son los intérpretes y también los responsables de la dramaturgia de este montaje, que cosechó un gran éxito y que ahora vuelve al Maldà para hacer temporada por tercera vez, del 29 de mayo al 29 de junio.
“Hemos querido homenajear a esos actores que hacen los papeles secundarios y también a todos los que trabajan detrás de un montaje. Y nos pareció que la época dorada del Paral·lel, en los años veinte, nos daba juego”, explican los creadores, que literalmente se dejan la piel en el escenario, con un ejercicio de fregolismo extraordinario, que llevan hasta la extenuación y mantienen al público en un estado de atención hipnótico.
“Las anécdotas que salen surgen de cosas que hemos leído, que nos han pasado o que nos han contado”
Como intérpretes de compañía, Cot y Aubert saben muy bien que no hay ningún papel pequeño y que todos suman a la hora de montar un espectáculo. “A veces subestimamos a los secundarios, también nosotros cuando interpretamos uno, y son importantes en este mundo –explican–. Encontramos paralelismos con lo que nos pasa hoy a nosotros”. Y todo ha acabado siendo un vodevil, en el que el público ve lo que pasa entre bambalinas. Los dos intérpretes cambian constantemente de vestuario, pero también de personaje, de manera que el ritmo de la pieza es trepidante, y las carcajadas no se detienen.
Dirigidos por Adrià Aubert, los dos intérpretes interpretan quince personajes y una veintena larga de cambios de vestuario en el camerino que ve el público, mientras que en el escenario, que no se ve pero que sí se oye, brillan las estrellas del momento, Tina de Jarque y Alady. “No ha sido un espectáculo sencillo de llevar a cabo, ya que al lado del camerino pasa una obra entera, que hemos tenido que grabar y montar nosotros mismos”, detalla el director.
Laura Aubert apunta: “La idea inicial surgió de una biografía de Alady, quien fue una gran estrella y que ahora poca gente sabe quién es, y eso también sorprende”, prueba fehaciente de la naturaleza efímera de las artes escénicas. Aubert continúa: “La biografía refiere que un empresario vendió mal una obra con muchas estrellas porque era un pupurri de números de estilos diversos y él dijo que era una revista, y así fracasó”.
“La mayoría de las anécdotas que salen en la obra son reales y surgen de cosas que hemos leído, que nos han pasado o que amigos nuestros nos han contado,” continúa el actor. La actriz pone ejemplos: “Hay un momento en que cae un trozo de escenografía, conocemos las confesiones que se hacen los unos a los otros antes de salir a escena...”.
La compañía Els Pirates constata que, tanto entonces como ahora, los que trabajan en este mundo no lo pasan bien, pero lo han planteado con humor, con referentes del siglo XX, como los Hermanos Marx y Monty Python, y coreografías de la época. “Con Els secundaris queremos reivindicar a los actores menores y los géneros menores a través de un vodevil, un género que era totalmente menospreciado, como nuestros protagonistas. Como tanta gente y oficios de nuestra profesión”, concluyen los dos creadores, Bernat Cot y Laura Aubert, que están sencillamente deslumbrantes. ¡Viva el Paral·lel!

