‘Llogatera’: los aprietos de una inquilina en el teatro Akadèmia

Teatro

Júlia Truyol protagoniza la pieza de Paco Gámez, que ha adaptado a la Barcelona actual con Rubén de Eguía

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Júlia Truyol interpreta 'Llogatera', de Paco Gámez, adaptada i dirigida per Rubén de Eguía, al teatre Akadèmia. Setembre 2025

Júlia Truyol en ‘Llogatera’, de Paco Gámez, dirigida por Rubén de Eguía

Noemí Elías / Akadèmia

Desde que en el 2018 Paco Gámez estrenó la obra Inquilino, la realidad de los alquileres no ha dejado de empeorar considerablemente. “El problema es que los alquileres suben y suben, y los sueldos no mucho”, declara Rubén de Eguía. El actor debuta como director con esta obra, que ha adaptado a la realidad actual de Barcelona, y que, según el flamante director, tenía que interpretar Júlia Truyol. Con todos estos ingredientes, y ahora con el título de Llogatera, este nuevo montaje se estrena esta semana, inaugurando la temporada del teatro Akadèmia.

De Eguía explica cómo decidió debutar en la dirección justamente con esta obra: “En el 2017, Paco Gámez vive una experiencia muy parecida a lo que le pasa a la arrendataria y es cuando escribe Inquilino. Hace un año y medio, leí el texto y le dije a Paco que eso era más vigente que nunca, y que lo teníamos que hacer en Barcelona y en catalán, porque la realidad de aquí es casi más espantosa que en Madrid. Ahora ya no hay que ir a las grandes capitales. Incluso en ciudades que no parecen capitales también les pasa lo mismo. Y vi clarísimo que no tenía que ser un hombre, sino una mujer, y que tenía que ser Júlia Truyol”.

La dificultad para poder encontrar un sitio donde vivir cada vez es más extensa, y ya no afecta solo a los jóvenes

“Cuando dijo que sí, con Paco Gámez hicimos una adaptación muy exhaustiva y profunda, con la complicidad de Júlia desde el primer momento y también del Sindicat de Llogateres –continúa De Eguía–. Es una temática que hace falta que esté apoyada con esta conciencia de compromiso, de querer seguir cuestionándonos todas las cosas que nos apelan como ciudadanos”.

Pero el director no olvida uno de los grandes objetivos del teatro: “Esto es un espectáculo y mantenemos la voluntad de entretener, pero también es un espacio donde se puede abrir el alma humana, con los defectos, las virtudes y las penurias”. Y hace una reflexión sobre la situación real actual de la vivienda: “Es impactante con respecto a los precios que uno paga para vivir, ver cómo ha subido el alquiler, en cambio cuando el personaje habla de lo que cobra, los sueldos no han subido tanto”.

Júlia Truyol

La inquilina de la obra de Paco Gámez se ve obligada a renunciar a su piso

Akadèmia

La inquilina de la obra de Paco Gámez vive en un piso de 38 m² y se ve obligada a renunciar a este piso pequeño, el personaje parte de un espacio pequeño, sin ningún lujo. “Yo siempre he compartido piso, no he estado nunca solo, y tengo que decir que tengo algún amigo que vive con 38 m² y se consigue darle un encanto. El problema de lo que ha pasado durante los últimos años es que ahora la situación todavía es más cruel, porque es extensible a toda la sociedad. En estos siete u ocho años, esta dificultad para poder encontrar un sitio donde vivir cada vez es más extensa, y ya no afecta solo a los jóvenes. ¿Ahora, cuando te suben el alquiler, qué encuentras, si hay tanta competitividad?”. Con la obra, no pretenden dar lecciones, sino abrir preguntas: “Tenemos la responsabilidad de mirarnos nosotros mismos en el espejo para saber qué queremos”.

En el espectáculo se mantiene la voluntad de entretener y también de abrir el alma humana

En el debut como director, Rubén de Eguía también pasa nervios: “Siempre los he tenido como actor, y ahora los tengo como director, y son muy diferentes, porque quiero que la obra funcione, que guste y que cada uno se pueda llevar alguna cosita; que el espectáculo haga viajar al espectador”.

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Dirigir le viene de antiguo: “Cuando entré en el Institut del Teatre, quería hacer dirección. Pero tenía 18 años y pensé que quizá primero tenía que hacer de actor, porque muchos de los grandes directores que he tenido, antes han sido actores. Primero el oficio, pues”. ¿Y a partir de ahora? “Espero poder seguir haciendo de actor y alternarlo con la dirección”, concluye.

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