El Fortuna de Dusseldorf, que hoy milita en la Tercera División alemana, ha rechazado la incorporación del jugador del Granada CF Show Weissman por los mensajes de odio que difundió en Twitter, siendo todavía jugador del club nazarí, y por los que fue investigado en España. Los aficionados de Dusseldorf —una ciudad que alojó un campo de prisioneros judíos durante la Segunda Guerra Mundial— denunciaron ante su club dichos mensajes, publicados en el otoño de 2023, para pedir al club que rechazase la incorporación, cosa que finalmente ha hecho.
En octubre de 2023, después del ataque de Hamas del 7 de octubre en el que murieron centenares de israelíes y decenas fueron secuestrados, el futbolista publicó en su cuenta de Twitter mensajes invitando a lanzar “200 toneladas de bombas sobre Gaza”. Incluso respondió a tuit de un soldado israelí, que mostraba en una foto a dos palestinos semidesnudos siendo apuntados por un fusil, preguntándole “por qué no apuntaba a la cabeza”.
Esos mensajes fueron denunciados por un grupo de palestinos residentes en Granada, donde entonces jugaba Weissman, acusándole de un delito de odio. El jugador no fue convocado para el partido contra Osasuna, posterior a sus tuit por “razones de seguridad”, adujo el club. En ese encuentro, el grupo se seguidores radicales de Osasuna Indar Gorri mostró una pancarta contra Weissman por la que un aficionado fue posteriormente denunciado. En el mercado de invierno fue cedido a la Salernitana de Italia.
La pasada temporada, Weissman, que también fue jugador del Real Valladolid, fue suplente en el Granada, que había descendido a Segunda División, club con al que está ligado hasta el 30 de junio de 2026 y que le busca una salida.
La situación no es inédita: la afición del Rayo Vallecano ya rechazó al ucraniano Roman Zozulya por sus mensajes de odio
En los últimos años, otros clubes han rechazado fichajes de jugadores por mensajes de odio o que la afición ha considerado inapropiados. Fue el caso del ucraniano Roman Zozulya, cedido al Rayo Vallecano desde el Real Betis. La afición rayista rechazó el fichaje acusándole de tener vínculos con la extrema derecha ucraniana y grupos neonazis, tras la publicación de imágenes suyas con simbología del Tercer Reich, como el número 88. El jugador lo negó públicamente.
En 2013, en Vigo, Salva Ballesta fue rechazado como segundo entrenador del club por que seguidores del club le atribuyeron una ideología de extrema derecha. Finalmente, no se incorporó al equipo gallego. Según el exjugador, Salva, hubo “una confusión entre política y deporte”. En 2015, el FC Barcelona canceló la incorporación del delantero Sergi Guardiola a su filial por los mensajes que había escrito en el pasado insultando a Catalunya y al club azulgrana.
En el extremo contrario esté el Racing de Santander. Entre 2003 y 2006 en el club militaron al mismo tiempo varios jugadores israelíes —Dudu Aouate, Yosi Benayoun, Ilan Bahkar— con jugadores de países y religión musulmana —Mehdi Nafti, argelino; Haolid Regragi, marroquí— sin que la convivencia se resintiera.