Como cada verano, una conocida marca de cerveza nos propone una campaña publicitaria para acompañar unas idílicas vacaciones en el Mediterráneo con esta bebida. La campaña de este año tiene como eslogan “Lo mismo de siempre”. Y no podría ser más idóneo para una firma que es global partner del Barça. De hecho,“Lo mismo de siempre” me parece un gran lema para resumir el verano blaugrana.
Junto con el sonido de las olas, el olor de sardinas a la brasa, las fiestas mayores de pueblo y las colas kilométricas de coches en la autopista en dirección a la Costa Brava, ya hemos incorporado a la postal de cada verano el tictac del reloj de las inscripciones. La primera jornada de Liga se acerca peligrosamente y, como cada año, hay aquella emoción, aquella desazón, aquella incertidumbre de saber si el Barça tendrá todos los jugadores inscritos. ¡Uy, casi! Ha ido de poco que esta Liga empiece con todo en orden. Pero entonces no sería lo mismo de siempre. Un verano más, hemos estado de nuevo pendientes del fair play y la regla del 1:1, que cada año se intenta explicar y resolver, y, de momento, nada.
Ya hemos incorporado a la postal de cada verano el tictac del reloj de las inscripciones
Lo que también forma parte de la banda sonora del verano en Can Barça es el ruido de las obras, de las máquinas puliendo, soldando y picando en un Camp Nou que todavía no está a punto. Este verano ha estado muy cerca de ser una realidad, los culés casi se veían, allí, sentados en las nuevas butacas. Pero de momento no. Y ya nadie se aventura a poner una fecha en firme para hacer realidad el retorno del equipo y los aficionados a casa.
Ahora bien, lo mismo de siempre también necesita alguna novedad para no caer en la rutina. Y este verano, la sorpresa ha llegado en forma de un breve pero intensísimo duelo de fuerzas entre el club y el ahora capitán, después ya no y finalmente sí, Ter Stegen. Una novedad que no habría que añadir a la lista de “Lo mismo de siempre” para repetir el próximo verano.
En Madrid quizá consumen otra cerveza, pero también les funciona bastante “Lo mismo de siempre”como consigna. Siguen perfeccionando el papel de víctima quejándose oficialmente de todo lo que sea posible. Y bien hecho que hace el club blanco, porque esta técnica sublimada por las criaturas que consiste en presionar a los progenitores por la vía de la insistencia y la protesta constante hasta el agotamiento ya les ha surtido efecto. Las constantes quejas a los árbitros, vía televisión oficial del club, que tuvieron como punto culminante la previa de la final de la Copa en Sevilla, han desembocado en una remodelación de la cúpula arbitral este verano. Y, oh sorpresa, la temporada ha arrancado con “Lo mismo de siempre” , los tres primeros puntos de Liga para el Real Madrid gracias a un penalti clamorosamente inexistente, una sobreactuación magistral de Kilian Mbappé y la incomparecencia del VAR. Lo mismo de siempre.