Por su parte el seleccionador de Portugal, Fernando Santos, rebajó el discurso del futbolista del defensa de 39 años. “Es fácil de explicar lo que ha pasado. Ellos han tenido situaciones de gol. Y nosotros hemos trabajado mucho y también las hemos tenido pero no hemos logrado marcar”, apuntó. También explicó que abordará su futuro y el del equipo al regreso a Portugal cuando converse con el presidente de la Federación, Fernando Gomes. "Voy a hablar con el presidente, que es como lo hemos hecho siempre, y vamos a ver qué es lo mejor para la selección portuguesa. Presentar mi renuncia ni siquiera es parte de mi léxico”, señaló en conferencia de prensa el seleccionador luso, que tiene contrato hasta 2024.
En el campo la felicidad era abrumadora. “Doy las gracias a mis compañeros y al público que nos ha ayudado mucho. Les he dicho a mis compañeros que vamos a trabajar por ganar este Mundial”, dijo En-Nesyri, autor del único gol del partido.
Bono y Hakimi celebrando la clasificación de Marruecos para las semifinales del Mundial
DPA vía Europa Press / EP
Igual de importante que su gol fue la actuación bajo palos de Bono. Portugal apenas tuvo tres ocasiones de gol pero allí estaba el cerrojo de la portería marroquí que no ha encajado ni una diana de ningún rival en esta Copa del Mundo. Tan solo un tanto en propia portería en la fase de grupos contra Canadá. “Es muy difícil encontrar las palabras para describir este momento. No sé que techo puede tener Marruecos porque pudimos sacar adelante todos los partidos”, deslizó visiblemente emocionado. Sobre su excelente trabajo Bono tiró de su ya conocida humildad. “Sabía que Portugal tendría ocasiones. Yo siempre digo que el portero debe intentar hacer su trabajo. Es lo que he intentado. Y ahora toca disfrutar de todo y a afrontar lo que viene con toda la ilusión del mundo”, sentenció. El colofón emocional de Marruecos lo terminó de contar Amrabat. “Hemos luchado con el corazón. Por el país, por la gente, por la selección... por todos”, sentenció.