La inflación tiende a estabilizarse tras el repunte con el que inició el verano. La subida de los precios se situó en agosto en el 2,7% con respecto al mismo mes del año anterior, lo que supone un nivel similar al de julio, según los datos adelantados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La tasa de inflación queda ahora contenida después de experimentar subidas en junio y julio, de siete décimas en total, que interrumpieron las bajadas desde febrero, momento en el que el índice de precios de consumo (IPC) llegó a situarse en el 3%.
El IPC subyacente, que excluye la energía y los alimentos frescos, avanza en cambio una décima, hasta el 2,4% con respecto a agosto del año pasado, y se mantiene por debajo del índice general, como viene ocurriendo desde mediados del 2024.
Uno de los elementos que contribuyen a la estabilización de la inflación general en agosto ha sido que los precios de los alimentos y de las bebidas no alcohólicas disminuyeron más que en agosto de 2024.
También se ha producido un encarecimiento de la electricidad, pero en una intensidad inferior a la registrada hace un año. Los carburantes se han abaratado algo con respecto a julio, pero en menor medida que en el 2024.
Economía sostiene que las familias están recuperando poder adquisitivo
Desde el Ministerio de Economía destacan como elementos positivos “la estabilidad de los precios y las subidas de los salarios”, que “están permitiendo a las familias recuperar de forma progresiva su poder adquisitivo”.
La inflación se sitúa sin embargo ahora en España por encima de la media de la zona euro, donde rondaba el 2% en julio, el objetivo para la política monetaria del BCE. Entre los países del euro, los precios suben ahora seis décimas menos que hace un año.
Previsiones de moderación de cara a fin de año
”El mes ha sido bueno en precios, no han crecido con respecto al anterior”, destaca Manuel Hidalgo, senior fellow de EsadeEcPol y profesor de la Universidad Pablo de Olavide. “Podemos decir que los precios se ha comportado de manera positiva”.
Esta apreciación parte también de lo ocurrido en la primera mitad del 2025. “La inmensa mayoría de las subidas de precios viene de fuera”, recuerda Hidalgo, y el primer semestre del año ha estado marcado por las tensiones en Oriente Medio, en los que la energía contribuyó a elevar las tasas interanuales.
Tras estos efectos, de cara a la segunda parte del año “la previsión es más de moderación, aunque no demasiada”. Es probable que ya se haya alcanzado un “pico local” y que ahora, con los alimentos a la baja y la electricidad con mejor comportamiento, la tendencia sea a la baja.
Los servicios turísticos han tirado hacia arriba los precios
Raymond Torres, director de Coyuntura y Análisis Internacional de Funcas, indica que el dato de inflación en agosto confirma “un cierto repunte” en las presiones inflacionarias, que sitúan a España “bastante lejos” del objetivo del 2% del BCE.
El repunte, explica, se debe a dos factores. “Hemos visto una inflación en los servicios asocios al turismo internacional por encima del 3%”, señala. “Otro frente tiene que ver con los alimentos no elaborados. Parece que hemos aflojado algo en agosto, pero la tendencia superaba el 5% o 6% anual en los últimos meses por eventos climáticos y por la dificultad para encontrar mano de obra”, indica. “Es un fenómeno global”.
El responsable de Coyuntura de Funcas cita como elemento de preocupación el diferencial de inflación con respecto a la media europea. “Esto significa también que estamos perdiendo algo e competitividad en términos de precios”, aunque “no es grave de momento porque el diferencial es por ahora limitado”.
Las previsiones que maneja Funcas apuntan ahora a una inflación cercana al 3% en septiembre por el efecto base. Después, las presiones de precios en el turismo podrían tocar techo y los precios generales podrían ir convergiendo “poco a poco” con la media europea. De cara al año que viene, podrían estar “en cotas cercanas al 2%”, señala Torres.
Las incertidumbres sobre la evolución de precios se siguen centrando en el exterior. Guillaume Tresca y Paolo Zanghieri, de Generali, apuntan precisamente a un eventual deterioro de la confrontación entre Israel, EE.UU. e Irán como elemento de riesgo capaz de situar de nuevo el barril de crudo cerca de 70 dólares y presionar al alza los precios.
Tasa mensual del 0%
La tasa mensual de variación mensual de los precios quedó en el 0% en agosto, esto es, no suben ni baja en términos generales con respecto a julio. Un mes antes habían descendido un 0,1%. Sin embargo, en los nueve meses anteriores habían encadenado subidas.