El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, prometió en el último debate de política general impulsar la construcción de 214.000 pisos en Catalunya, la mitad de ellos, de protección oficial. Ahora, la consellera de Territori i Habitatge, Sílvia Paneque ha puesto cifras a lo que costaría promover esas 100.000 viviendas públicas. Así, estima que se tendrán que movilizar unos 8.000 millones de euros en total con el mismo sistema que se está ejecutando en el plan 50.000, a través del Institut Català de Finances y con un complemento a los promotores.
La consellera ha explicado el detalle de la estrategia para edificar los 214.000 pisos, donde el Institut Català del Sòl (Incasòl) jugará un papel decisivo para la parte de vivienda protegida. “La administración actuará directamente, aunque lo haremos de forma concertada con los municipios”, ha detallado Paneque.
El objetivo es transformar suelo situado en zonas estratégicas de Catalunya y tenerlo listo hacia el 2030. Por ahora, ya se han identificado 179 sectores que se encuentran en diversos estadios del trámite urbanístico, con potencial para construir estas 214.000 viviendas. Será Territori el que impulsará directamente la transformación de suelo en solares listos para edificar i el Incasòl será la administración actuante. De los 100.000 pisos públicos, está previsto que la mitad se destinen a alquiler. La otra mitad corresponderá a vivienda libre.
Está previsto que el Consell Executiu de la semana que viene apruebe este nuevo plan, con la creación de una oficina que centralizará su ejecución. Para ello, es clave la aprobación este jueves de la ley de medidas urgentes en materia de vivienda y urbanismo, que permitirá reducir el tiempo de algunos trámites urbanísticos.

