La casa estadounidense de subastas Julien’s Auctions ha anunciado que organizará la cita Princess Diana’s style & a royal collection en el hotel The Peninsula de Beverly Hills el próximo 26 de junio, donde se subastarán más de 200 objetos, desde bolsos y complementos hasta vestidos de alta costura, que pertenecieron a lady Di, los duques de Windsor, la reina Isabel II, la reina Madre y otros tesoros de más miembros de la familia real británica que se remontan al siglo XIX.
Según publica la versión estadounidense de Vanity Fair, los objetos que lució la anterior princesa de Gales han batido récords durante los últimos años y, según cuenta el cofundador y director ejecutivo de la casa de subastas, Martin Nolan, muchos de los compradores son museos.
John Travolta baila con Diana de Gales en la casa Blanca en 1985.
En el 2023 el vestido de Diana diseñado por Jacques Azagury en 1985 se vendió por 1,14 millones de dólares en Julien’s Auctions. Y en el 2024, un par de zapatos suyos se subastaron por 390.000 dólares. Muchas de las piezas puestas a la venta en esta subasta son objetos de amigos y colaboradores de la princesa, pero otros fueron vendidas originalmente por la propia lady Di en su famosa subasta de 1997 en Christie’s de 79 de sus vestidos más emblemáticos.
La subasta de objetos de la madre de los príncipes Guillermo y Enrique es muy usual. En el 2023, Kim Kardashian pujó y consiguió una de las joyas que lució en vida Diana, la cruz de Attallah, una exclusiva pieza creada en 1920 por la joyería londinense Garrard compuesta por amatistas de gran tamaño, un aderezo de diamantes en talla brillante, oro y plata. La pieza, subastada en la casa Sotheby’s Royal and Noble, alcanzó los 200.000 euros.
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Hace unos años otro vestido de Diana también superó las expectativas marcadas en la subasta de Kerry Taylor Auctions. En ese caso, el diseño fue el que Diana llevó para bailar con John Travolta en la Casa Blanca. Se vendió por más de 400.000 euros, una cifra que confirmaba que la princesa de Gales seguía generando interés más de veinte años después de su muerte.