El hijo del presidente de LaLiga, Javier Tebas, cambiará el esmoquin por el traje de luces el próximo 8 de agosto en la Feria Taurina de la Albahaca de Huesca, donde debutará como novillero sin caballos tras dos años de preparación intensa. Diego Tebas, de 24 años, ha decidido dar un giro radical a su carrera profesional como abogado para perseguir su verdadera vocación: la tauromaquia. Así lo ha contado en una entrevista concedida a El Debate, donde ha compartido su visión sobre el toreo y el esfuerzo que ha supuesto llegar hasta aquí.
“No es un capricho, ni mucho menos. Es un sueño. Lo dejaría todo por ser figura del toreo”, asegura con determinación.
Disciplina, fe y herencia familiar
Diego Tebas ha compaginado su carrera como abogado con dos años de intensa preparación taurina y el apoyo de su familia
Su camino hasta este debut ha sido largo, exigente y silencioso. Diego se ha preparado durante dos años bajo la guía de Jesús Montes “El Pare”, figura respetada en el mundo taurino. El entrenamiento ha incluido tentaderos constantes, rutina de gimnasio, alimentación estricta y una preparación mental y espiritual marcada por la fe. “Creo mucho en Dios. Y creo que Dios me puso esta oportunidad en mi vida. No es una casualidad”, confiesa.
Diego reconoce que ponerse delante del toro no le provoca miedo, pero sí una enorme responsabilidad: “A día de hoy, siento miedo a no estar todo lo bien que quiero estar y para lo que me estoy preparando con mucho esfuerzo”, afirma.
Formado en Derecho, Diego ha compaginado su trabajo en el despacho familiar con la disciplina diaria del aspirante a torero. La afición a la tauromaquia le viene de su abuelo Manolo Tebas, del Puerto de Santa María, y ha estado presente desde su infancia. Sin embargo, hasta ahora, nadie de la familia se había atrevido a dar el paso de salir al ruedo.
Sus padres, Javier Tebas y Marta Coiduras, lo han acompañado en cada etapa del proceso. Su madre le ha regalado su primer traje de luces, confeccionado por el sastre Justo Algaba, y su padre ha contribuido económicamente a la preparación: “El toro es muy caro”, comenta el propio Diego con naturalidad.
Del palco al tendido: el orgullo de un padre
La bendición de Javier Tebas
Acostumbrado a los focos del fútbol, a los despachos de poder y a las batallas públicas por la gestión de LaLiga, Javier Tebas mostró su faceta más íntima y emocional al anunciar en redes sociales el debut de su hijo. Sin menciones al VAR ni a los clubes, solo orgullo de padre y devoción por el esfuerzo.
En un mensaje compartido en su perfil oficial, el dirigente expresó con claridad lo que significa este paso para Diego y para toda la familia:
No es habitual ver al presidente de LaLiga compartir asuntos personales en redes. Pero esta vez, Javier Tebas no lo hizo como gestor, sino como padre orgulloso. Su hijo ha elegido un camino distinto, ajeno a los estadios y a los contratos televisivos, pero lleno de pasión, riesgo y entrega. Y él lo acompaña sin reservas, como testigo de una vocación que nació en silencio y hoy se hace carne en la arena.
Porque el apellido Tebas ha estado siempre ligado al poder del fútbol. Pero el 8 de agosto, por primera vez, sonará en una plaza de toros. Y allí, bajo la luz de Huesca, será Diego quien se juegue el nombre, el cuerpo y el alma.