“Vuestro comportamiento desvirtúa por completo el espíritu y los principios más básicos de Gran Hermano”. Con esta frase terminó la experiencia del valenciano Julio Granado, apodado ‘El Feroz’, en la duodécima edición del reality tras solo 18 días dentro de la casa de Guadalix de la Sierra. Mercedes Milá se mostró implacable con él y con Flor Luján, la concursante con la que había comenzado un romance, que también resultó eliminada disciplinariamente por haber pactado fuera del programa una relación falsa con fines mediáticos. La jugada les salió cara: se convirtieron en los primeros invitados a marcharse por crear una estrategia desde que arrancó el formato en España.
Lo que vino después fue casi un guion escrito con la tinta del oportunismo televisivo, entre platós, debates, exclusivas, enfrentamientos y cachés de vértigo. “En Sálvame Deluxe cobré 30.000 euros por una hora. Enfrentarme a Rafa Mora, 6.000. Ir a un reality, 10.000”, recordaba Julio en una entrevista reciente. Y es que durante dos meses, pese a lo ocurrido, su cara fue habitual en la parrilla de Telecinco, pero aquella fama exprés se agotó tan rápido como llegó. Y así terminó por desaparecer de los focos. Sin hacer ruido, como si entendiera que lo suyo con la televisión fuese también solo un affaire.
Escolta y empresario
De platós y luces al gimnasio y la calle: así ha reconducido su vida el ‘gran hermano’
A día de hoy, con 44 años, Julio no pisa platós, pero sí escenarios… Aunque desde la barrera. En la actualidad, trabaja como escolta privado de figuras del panorama musical urbano de nuestro país como Omar Montes o Kidd Keo. Además, su empresa, ‘Feroz Squad’, se ha especializado en ofrecer seguridad a artistas, deportistas y locales de ocio en la zona de Levante. Una historia que, más que a las caídas, parece remitir a los cambios. Ese espíritu de perserverancia y lucha, que indirectamente liga con su pasado antes de pasar por la pequeña pantalla como campeón de España de kickboxing y boxeador profesional en la categoría superwélter.

Junto a Omar Montes, en una imagen de redes sociales publicada en junio de 2023.
Cabe destacar que su relación con Omar Montes va más allá de lo laboral. Se conocen desde antes de que el cantante saltara a la fama, y fue Julio quien, según contó el propio intérprete de Alocao en conversación con Pablo Motos durante una de sus apariciones en El Hormiguero de Antena 3, Granado le dio su primer trabajo en una discoteca de Benidorm. Desde entonces compartes entrenamientos, noches de fiesta y un vínculo que sigue inmarchitable. No es de extrañar, pues, que en redes abunden las fotos de ambos juntos, sea en el gimnasio o en el backstage de los conciertos.
Con la misma fuerza
El regreso al ring y la apuesta por el negocio de la noche en Benidorm
El pasado 31 de mayo, en Bilbao, el exconcursante sorprendió a muchos con su regreso a la competición en la Xtrike Combat Super League. Su debut en MMA a los 44 años fue un testimonio de que el físico, si se cuida, no entiende de fechas. La muestra de que, más de una década después de aquel periplo mediático por Mediaset, para ‘El Feroz’ el deporte sigue siendo su mejor refugio.

Julio, en una imagen de redes sociales publicada en octubre de 2023.
Para muestra su cuenta de Instagram, donde acumula más de 90.000 seguidores, comparte rutinas de entrenamiento, homenajes a su abuelo fallecido y fotos entrañables junto a su madre.Además, aunque ya no busca cámaras, Julio no ha renunciado al escenario que mejor domina: la noche de Benidorm, donde todavía hoy el alicantino organiza eventos y colabora en la seguridad de locales emblemáticos de la zona.