Loles León es una de las actriz más populares del panorama nacional. Con más de 50 años de trayectoria profesional a sus espaldas, la intérprete, de 75 años, se ha ganado el cariño del público con personajes que han pasado a la historia del cine y de la televisión. La catalana saltó a la fama como chica Almodóvar en Mujeres al borde de un ataque de nervios, pero sus icónicos e inolvidables personajes en Aquí no hay quien viva o La que se avecina la han consolidado como una figura imprescindible del audiovisual español.
El pasado mes de abril, la actriz barcelonesa fue condecorada por el president de la Generalitat, Salvador Illa, con la Creu de Sant Jordi, la distinción más importante que otorga la Generalitat de Catalunya a quienes han destacado por sus méritos en el ámbito cívico y cultural. Un reconocimiento por su trayectoria que abarca más de cinco décadas dedicadas al cine, la televisión y el teatro.

La actriz Loles León en una imagen de archivo
Con motivo de este galardón, la actriz concedió hace unas semanas una entrevista a El Periódico, donde quiso hablar abiertamente de sus inicios en el mundo del cine, que estuvieron marcados por su llegada a Madrid y su encuentro con Pedro Almodóvar.
León confesaba que viajó hasta Madrid con un objetivo muy claro: ir a la productora de Pedro Almodóvar, El Deseo. ''Llamaba por teléfono día tras día, y al final me dieron cita, era yo muy pesada. Entré dando golpes, soy espontánea, y les hizo gracia a los hermanos, Agustín y Pedro. Fue impactante para los tres, hablamos como amigos de toda la vida. No tenían ningún papel, pero seis años después Pedro me vio en mi espectáculo y me dio uno en Mujeres al borde de un ataque de nervios'', revelaba.

Pedro Almodovar con Rossy de Palma, Julieta Serrano y Loles León en los Premios Goya
La intérprete catalana reconocía que se desenvuelve a la perfección en todos los género. ''Puedo hacerlo todo porque me gusta la actuación en todos los sentidos. Primero veo qué me ofrecen, y si me va a divertir. Si no me gusta pido disculpas y digo no'', aseguraba. Sin embargo, sí confesaba que el papel que más desafiante de su carrera fue sin duda Lola en Átame, la película de Almodóvar de 1989.
''Me pareció que era un momento importante en el cine. En 'Amor de hombre' yo llevaba el peso de toda la película y al terminar dije que no quería más papeles protagonistas, es una responsabilidad muy grande'', confesaba. A pesar de no destacar por papeles protagónicos, Loles León ha sabido hacerse un hueco sólido y duradero en la industria audiovisual. ''Será por mi actitud potente, la presencia, la imagen. A veces me envían un guion muy malo y cuando lo digo me dicen que por eso me lo envían, para que lo mejore y le de potencia'', afirmaba.