A los 67 años, Angela Bassett ha aprendido que cuidarse no significa sacrificarse, sino ser constante y realista. Entre jornadas de hasta 16 horas de rodaje, ha incorporado pequeños hábitos que marcan la diferencia: caminar al menos 30 minutos diarios en una “walking pad” instalada en su tráiler y prestar más atención a su alimentación.
El poder de la prevención
La lección de vida que marcó a Angela Bassett
No siempre fue así, confiesa a PEOPLE. “Cuando eres joven, das por sentada tu salud. Te sientes invencible, comes lo que quieres, duermes poco, disfrutas de todo. Y, a medida que maduras, das un paso atrás y empiezas a cuidarte un poco más”.
El cambio de perspectiva llegó con experiencias dolorosas. “He visto de cerca el impacto que puede tener una mala salud”, admite al recordar las complicaciones cardíacas de su madre y la diabetes tipo 2 de su tío. “He hablado de mis seres queridos y de los desafíos que enfrentaron al gestionar y luchar contra problemas médicos graves y potencialmente mortales”. De esas vivencias extrae una lección contundente: “Cuando llegas tan lejos en el camino, intentar recuperar el tiempo perdido se vuelve realmente difícil”.
Angela Bassett reconoce que su personaje en 9-1-1 le enseñó que “hay poder en la prevención” y reforzó su compromiso con la salud y la conciencia
Su papel como la sargento Athena Grant en 9-1-1 también ha dejado huella. “Al interpretar a este personaje, muchas de las historias que surgen son como arte imitando a la vida. A veces bromeo diciendo: ‘¿Tienen una cámara en mi casa? ¿Están mirando mi vida?’”, comenta entre risas. Pero ese trabajo también le ha dado una certeza: “Hay poder en la prevención. Es la clave”.
Ese mensaje la llevó a colaborar con GSK en la campaña Sideline RSV, que busca concienciar sobre los riesgos del virus respiratorio sincitial (RSV) en adultos mayores y la importancia de vacunarse. Bassett lo vincula a una experiencia personal: “Una amiga muy querida —que cuidó de mi madre cuando yo estaba en un rodaje—, vio cómo su madre se contagiaba. Así que he estado muy cerca del RSV a través de personas cercanas”. Por eso, lanza un consejo claro: “Ahora que decimos adiós al verano y llegan las temperaturas más frías, este es el momento perfecto para hablar con tu médico o farmacéutico sobre tu riesgo y sobre la vacunación, si es algo que puede ser adecuado para ti”.
Ahora se trata de priorizar tu descanso, de cuidar lo que comes y de considerarte como si fueras una VIP”
Consciente de su influencia, ha decidido usar su voz para informar y motivar. “Como tengo esta plataforma, es importante para mí destacar estos temas y animar a otros a pensarlos de forma significativa. Todo empieza con la conciencia… así que levanto la mano, alzo la voz y me expongo”.
Tras celebrar su 67 cumpleaños, Bassett resume su filosofía de vida: “Valoro mi salud y amo esta vida. Así que hago lo mejor que puedo el 80 % del tiempo”. Lejos de extremos imposibles, ha cambiado hábitos con equilibrio. “Me encantan los dulces y crecí en el sur, donde abundan los chicharrones y todo eso, pero ahora eso tiene que quedarse en el recuerdo”, confiesa con humor. “Ahora se trata de priorizar tu descanso, de cuidar lo que comes y de considerarte —como le digo a mi hermana— como si fueras una VIP. Necesitas lo mejor y tienes que tratarte de la mejor manera posible”.
A los 67, Angela Bassett es el ejemplo de que cuidarse no es renunciar, sino elegir cómo vivir. Entre rodajes maratonianos y compromisos, ha aprendido que el verdadero lujo está en tratar el cuerpo con respeto y la mente con calma. “La prevención no es una carga, es un regalo que nos hacemos a nosotros mismos”, afirma Basset. “Si empezamos a cuidarnos cuando todavía estamos fuertes, la madurez puede llegar con la energía y la vitalidad que nos permitan seguir disfrutando de la vida en plenitud”.

