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Hemingway, el Nobel suicida
HEMEROTECA
Ernest Hemingway, ganador del premio Nobel de Literatura en 1954, se suicida en su casa de Ketchum, Idaho
Ernest Hemingway escribe en una mesa portátil durante una caza mayor en Kenia en septiembre de 1952)
Getty Images
Senior Editor
Al final de su vida, el Nobel Hemingway estaba convencido de que lo mejor de la fiesta (título de una de sus novelas más célebres) había pasado. Las contrariedades que se agolpaban le parecieron irreversibles: tuvo que abandonar su adorada Cuba, sintiendo incomodidad con el recién llegado al poder Fidel Castro. Le costaba cada vez más escribir de una manera organizada, de forma que la redacción de su novela El verano peligros o, ambientada en España, devino una odisea. Además, se creía vigilado por el FBI, algo que pareció una paranoia, pero se demostraría veraz décadas después al desclasificar la agencia sus archivos.
Y su salud era pésima, a causa de diversos accidentes en sus viajes por el mundo y de su alcoholismo pertinaz. Todo eso le llevó el amanecer del 2 de julio de 1961, a punto de cumplir los 62 años, a agarrar su escopeta favorita y descerrajarse un tiro en la cabeza poniendo el punto final a su última historia.