Suizo de nacimiento, catalán de corazón, Hans-Max Gamper Haessig, alias Joan Gamper, fundador y cinco veces presidente del FC Barcelona, toma una drástica decisión. Con sigilo, a fin de no alertar a su mujer e hijos, se encierra en su habitación del tercer piso de la barcelonesa calle Girona, empuña una pistola y se descerraja un tiro. Lejos queda aquel 29 de noviembre de 1899, cuando, junto a once amigos, funda el Barça, el club que ha convertido no sin esfuerzo en seña de identidad del catalanismo, apoyando a la Mancomunitat y resistiéndose a la dictadura de Primo de Rivera.
Ese 30 de julio de 1930, abrumado por presiones políticas e intrigas internas que le han usurpado su obra cumbre, el Barça, y arruinado por la caída de Wall Street, no ve otra salida. Cuenta solo 52 años.
