La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, anunció este jueves una recompensa de 50 millones de dólares (unos 42,8 millones de euros) por información que conduzca al arresto del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Estados Unidos acusó a Nicolás Maduro en 2020, durante la primera presidencia de Donald Trump, por delitos de narcotráfico y terrorismo y en enero de 2025, la actual Administración aumentó la recompensa por su captura a 25 millones de dólares.

Cartel de la recompensa ofrecida por aportar información sobre Nicolás Maduro
EE.UU. ya acusó al presidente venezolano por delitos de narcotráfico y terrorismo en 2020; en enero de este 2025, la recompensa era de 25 millones de dólares
Bondi compartió en sus redes sociales un video en el que describe esta recompensa como “histórica” y calificó a Maduro como uno de los mayores narcotraficantes del mundo y una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos. “Maduro utiliza organizaciones terroristas extranjeras como Sinaloa y el Cartel del Sol para introducir drogas letales y violencia en nuestro país”, indicó.
Además, la fiscal estadounidense anunció que hasta la fecha, “la Administración de Control de Drogas (DEA) ha incautado 30 toneladas de cocaína vinculadas a Maduro y sus socios”, con casi siete toneladas vinculadas al mandatario venezolano, “lo que representa una fuente principal de ingresos para los carteles con sede en Venezuela y México”.
Bondi también reveló que el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha incautado más de 700 millones de dólares en activos vinculados a Maduro, así como dos aviones privados y nueve vehículos. “Maduro no escapará de la justicia y rendirá cuentas por sus atroces crímenes”, concluye en su mensaje la fiscal general.
La reacción de Caracas: “Patético”
Desde Venezuela, se respondió rápidamente a la decisión del gobierno de Donald Trump, calificándola de “patética”. ”Rechazamos esta burda operación de propaganda política”, declaró el canciller venezolano, Yvan Gil, en un comunicado.
“Mientras desmantelamos los complots terroristas orquestados desde su país, esta mujer está montando un circo mediático para complacer a la ultraderecha venezolana, derrotada”, declaró el ministro Yvan Gil el jueves, en respuesta a Pam Bondi.
Un presidente “ilegítimo”, según EE.UU.
El 10 de enero, diez días antes de la toma de posesión del presidente Donald Trump, el gobierno de Joe Biden ya había denunciado como “farsa” e “ilegítima” la investidura de Nicolás Maduro, quien había sido reelegido seis meses antes para un tercer mandato de seis años.
El entonces secretario de Estado, Antony Blinken, y el Departamento del Tesoro de Estados Unidos impusieron nuevas sanciones a Caracas, aumentando la recompensa de 15 a 25 millones de dólares por información que condujera al procesamiento del líder venezolano. Washington consideró que Nicolás Maduro “claramente perdió las elecciones presidenciales de 2024 y no tiene derecho a reclamar la presidencia”.
El sucesor de Antony Blinken, el republicano Marco Rubio, reiteró las mismas acusaciones este mismo jueves. ”Desde 2020, el Sr. Maduro ha estrangulado la democracia y se ha aferrado al poder en Venezuela”, declaró el alto diplomático estadounidense en un comunicado.

Donald Trump mantiene la presión contra el presidente venezolano Nicolás Maduro
Trump busca así derrocar a Nicolás Maduro y asfixiar económicamente a Venezuela. Desde su regreso a la Casa Blanca, el actual presidente de los EE.UU. ha endurecido notablemente el embargo petrolero, anunciando que impondría aranceles adicionales a los países que compren petróleo venezolano.
El gobierno de Nicolás Maduro ha denunciado desde hace tiempo la injerencia estadounidense en los asuntos venezolanos. Su ministro del Interior afirmó el jueves que los servicios de seguridad frustraron un atentado con bomba en Caracas, acusando, como suele suceder, a la oposición y a Estados Unidos de ser los instigadores. Las autoridades denuncian periódicamente complots reales o imaginarios destinados a desestabilizar el país o derrocar a Nicolás Maduro.