El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, inicia formalmente el miércoles su segunda visita de Estado a Reino Unido, con la pompa real como telón de fondo para unas complejas conversaciones diplomáticas.
El rey Carlos y la familia real desplegarán la alfombra roja para el presidente cuando llegue a Windsor, el castillo habitado más antiguo y más grande del mundo y hogar familiar de los monarcas británicos durante casi 1.000 años, con una procesión de carruajes, salvas de artillería, un desfile aéreo militar y un lujoso banquete.
Según las autoridades británicas, será la mayor ceremonia militar de bienvenida a una visita de Estado que se recuerda.