Volodimir Zelensky, presidente de Ucrania, lanzó ayer uno de los mensajes más dramáticos que haya pronunciado nunca a la nación. Zelensky, en uno de los momentos más bajos de su popularidad, y con una propuesta de paz de Estados Unidos que supone una casi capitulación ante el enemigo ruso, dijo que el país se enfrenta “a uno de los momentos más difíciles de su historia”.
El político ucraniano afirmó que Ucrania tiene ante sí el dilema de perder su dignidad -en referencia a las duras condiciones que contiene el plan de paz- o de perder a su principal aliado, Estados Unidos. O bien “los 28 puntos difíciles (del marco), o un invierno extremadamente crudo —el más crudo de la historia— y más riesgos. Una vida sin libertad, sin dignidad, sin justicia”.
“O bien los 28 puntos difíciles o un invierno extremadamente crudo, el más crudo de la historia”, afrma el jefe de Estado en su discurso más difícil
Zelenski lanzó su discurso después de haber mantenido una conversación con los tres primeros dirigentes europeos, Friedrich Merz, Keir Starmer y Emmanuel Macron, que le ofrecieron su apoyo y mostraron su sintonía con la posición ucraniana: discutir a partir de la actual línea de frente.
Se trató de una conversación amarga para todos: es muy probable que los europeos se enteraran del plan de paz después de que Rusia lo filtrara. Se trata, pues, de una bofetada para Europa, en la medida en que el plan contiene aspectos que afectan no solo a Ucrania sino al conjunto de la seguridad europea. En las cancillerías europeas se trabajó durante la tarde en una contrapropuesta que pueda llamar la atención del presidente de EE.UU., algo cada vez más remoto.
Zelenski habló después con el vicepresidente J.D. Vance, un hombre que fue especialmente hostil en el primer encuentro con Trump en la Casa Blanca y que no oculta su rechazo a que Estados Unidos se inmiscuya en los asuntos europeos. Vance debió plantearle a Zelenski la convicción de la Casa Blanca en los términos del plan de paz.
“Presentaré argumentos, persuadiré, ofreceré alternativas, pero definitivamente no le daremos al enemigo ningún motivo para decir que Ucrania no quiere la paz, que está entorpeciendo el proceso y que Ucrania no está preparada para la diplomacia” desgranó Zelenski en su discurso.
El plan de 28 puntos fue acordado por Steve Witkoff, enviado presidencial de EE.UU. Para Ucrania y amigo personal de Trump y Kirill Dimitriev, presidente del fondo soberano ruso y estrecho colaborador de Vladimir Putin en el último año.
El plan establece la entrega de toda la región del Donbas a Rusia, incluso aquellos territorios que todavía están en posesión de los ucranianos. También prevé una reducción drástica del ejército ucraniano (hasta 600.000 de los actuales 900.000), que se verá privado de armamento sofisticado, en especial de aquel que le permite hostigar las infraestructuras energéticas en Rusia.
Un soldado en el frente de guerra de Pokrovskm en la región de Donetsk
El acuerdo prevé que el ruso sea oficial en el país, así como la Iglesia Ortodoxa rusa e indica que la OTAN debe renunciar a integrar a Ucrania en la organización. También cierra la puerta a la presencia de soldados occidentales en territorio ucraniano.



