Las Claves
- Emiratos Árabes Unidos retira sus tropas de Yemen tras la exigencia de Arabia Saudita por un ataque aéreo en el puerto de Mukalla.
Un conflicto entre Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Arabia Saudita, a raíz de una incursión aérea de la coalición comandada por Riad sobre el puerto de Mukalla, resultó en que las autoridades de Abu Dabi dispusieran el retiro de sus tropas remanentes en Yemen.
De tal manera EAU acató la exigencia de Arabia Saudita, que solicitó que las tropas emiratíes salieran de Yemen en un periodo de 24 horas a raíz de la tensión provocada por el ataque aéreo contra lo que Riad describió como un lote de armamento relacionado con EAU.
La agresión ejecutada este martes representa el incremento de tensión más relevante hasta el momento entre las dos naciones dominantes del Golfo Pérsico. Ambos protagonistas principales, antiguamente bases fundamentales de la estabilidad en la zona, han experimentado cómo sus objetivos se distancian actualmente en cada sector, partiendo de los niveles de crudo hasta el dominio geopolítico.
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Arabia Saudita ya había alertado que la integridad de su nación representa un límite innegociable, al tiempo que acusó a EAU de incitar a los grupos secesionistas del sur de Yemen a realizar maniobras armadas que se aproximaron a los linderos del reino.
Representan las expresiones más severas lanzadas hasta la fecha por Riad frente a EAU en la pugna que los enfrenta, habiendo colaborado previamente en una alianza contra los hutíes yemeníes -afines a Irán-, si bien sus metas en Yemen se han ido alejando a lo largo de los años recientes.
Tensión
El incidente en Mukalla no causó decesos, si bien representa el incremento más crítico de las tensiones entre las dos administraciones que conservaban una alianza hasta hace poco.
Las tensiones se intensificaron dentro de la alianza cuando Abu Dabi respaldó a los grupos secesionistas del sur que perseguían la independencia, en tanto que Riad continuaba favoreciendo al gobierno de Yemen, con reconocimiento global, lo cual terminó provocando un distanciamiento evidente entre los dos socios.
El bloque encabezado por Riad afirmó este martes que atacó un embarcadero empleado para suministrar asistencia bélica foránea a los grupos secesionistas que cuentan con el aval de EAU. La ofensiva contra el envío destinado a los insurgentes en la terminal portuaria yemení de Mukalla, situada al sur de la nación, no causó fallecidos ni heridos y Arabia Saudita lo fundamentó debido a que el último fin de semana llegaron dos embarcaciones a Yemen procedentes del puerto emiratí de Fujairah.
Al llegar a ese sitio, de acuerdo con la propia alianza, las naves apagaron sus equipos de localización y desembarcaron abundantes suministros bélicos y transportes de asalto para brindar soporte al Consejo Transitorio del Sur (CTS), una agrupación independentista que pretende hacerse con el mando del territorio de Hadramaut.
La mercancía y la ofensiva subsiguiente han derivado en un incremento de la fricción en la zona, en la cual tanto Saná (la capital yemení) como Riad señalan a Emiratos Árabes Unidos por brindar apoyo al CTS con el propósito de incentivar la fragilidad interna en Yemen.
Yemen declara una situación de urgencia y un cierre completo durante un lapso de 72 horas.
Bajo este marco, el titular del consejo presidencial de Yemen, Rashad al-Alimi, revocó un tratado de defensa con Abu Dabi y manifestó que los sucesos ratifican que “los Emiratos Árabes Unidos presionaron y dirigieron al CTS para socavar y rebelarse contra la autoridad del Estado mediante una escalada militar”. Del mismo modo, proclamó el estado de excepción y una clausura aérea, terrestre y marítima de 72 horas.
Simultáneamente, el Ejército del Yemen comunicó este martes su respaldo total a las determinaciones nacionales tomadas y afirmó que las Fuerzas Armadas se encuentran listas “para el combate con el fin de cumplir sus deberes constitucionales y nacionales en cualquier circunstancia”.
Facciones independentistas de la zona sur se sitúan encima de una valla publicitaria durante una manifestación con el fin de manifestar su adhesión a los Emiratos Árabes Unidos.
Asimismo, Arabia Saudita manifestó que su protección interna constituía un límite infranqueable y apoyó una petición para que las tropas emiratíes salgan de Yemen dentro de un periodo de 24 horas. Este aviso muestra una retórica poco común por su firmeza dentro de los vínculos entre Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos, los cuales han comunicado que concluirán por iniciativa propia la labor de sus destacamentos contra el terrorismo en Yemen y abandonarán el territorio.
Buscando suavizar las hostilidades, Emiratos Árabes Unidos contestó solicitando la “moderación y la sabiduría”, aunque manifestó su descontento ante el pronunciamiento de Arabia Saudita sobre Yemen y su asombro por la incursión aérea en Mukalla. Del mismo modo, descartaron el relato de la coalición y sostuvieron que los suministros bombardeados no incluían equipo militar emiratí.
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La conexión entre Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, las dos coronas que junto a Catar compiten por el mando regional en el Golfo Pérsico, ha estado influenciada estos años recientes por la contienda de Yemen. A pesar de que Emiratos Árabes Unidos formaba parte de la coalición que pelea contra la insurgencia hutí respaldada por Irán (que domina el sector norte del país), en 2019 empezaron a retirar sus destacamentos del territorio, sosteniendo su apoyo al gobierno de Saná reconocido internacionalmente.
No obstante, a raíz del último ataque del CTS frente a las fuerzas gubernamentales de Yemen, que persigue la independencia de la región meridional, los socios del Golfo se encuentran más próximos que nunca al enfrentamiento en Yemen y corren el peligro de reactivar un conflicto interno vigente desde el 2014.
Tras las últimas acciones militares, el CTS demanda un dominio extenso del área meridional, abarcando la relevante provincia de Hadramout, abundante en recursos petrolíferos y que colinda directamente con Arabia Saudí por medio del desierto de Rub al-Jali. Riad conserva vínculos de carácter cultural e histórico con dicho territorio, y diversos ciudadanos saudíes de renombre localizan sus raíces en este lugar.