Bondad y sabiduría
La digitalización ha masificado el acceso al saber. De hecho, la inteligencia artificial ya lo sabe casi todo y cualquier estudiante con ella; pero no nos da sabiduría, porque ser sabio es mucho más que saber. Y basta con escuchar a Pere Lluís Font y sus 91 años de sabiduría para apreciar la diferencia. La sabiduría que dan los años a algunos como él consiste en distinguir entre lo esencial y lo accesorio. Y lo esencial, nos cuenta, lo aprendió en sus años de estudiar y enseñar Filosofía en Francia y aquí en la universidad. Estudiar y enseñar, que viene a ser lo mismo, es para él “mi vida, mi diversión y mi todo”. Así que nunca ha trabajado en el sentido etimológico, pero sí se ha esforzado siempre por voluntad propia, nunca por satisfacer su avaricia o la de algún amo. ¿Alguien puede haber sido y ser más sabio, bueno y feliz?
¿Traducir a san Juan de la Cruz al catalán le añade matices?
Josep Carner decía que traducir es la mejor forma de leer. Yo sabía de memoria desde niño poemas místicos de san Juan de la Cruz, pero, al traducirlo, he descubierto en él nuevas virtudes y debilidades.
¿Le ha hecho mejor a usted?
Hay fragmentos en su obra que tienen una eficacia casi sacramental. Te elevan.
¿Hay algo en su día a día, profesor, que también sea místico?
Soy profesor: mi trabajo es mi vida, mi diversión y mi todo. Habría pagado por ser profesor y aún he cobrado... poco.
Si aciertas al elegir tu oficio, ya no vuelves a trabajar nunca.
Yo acerté al empezar a dar clases en la universidad pública...
¿Algo bueno en no tener que darlas?
Con los años pierdes agilidad mental...
¿Con los años ganas algo?
Si tienes la suerte de que tu mente resista, tienes alguna ventaja, como la de haber aprendido a distinguir entre lo esencial y lo accesorio; entre el saber y la sabiduría.
¿Cuál es la diferencia?
La sabiduría es aprender la vida buena en el sentido moral y usual: lo esencial es ser bueno, y se empieza por no hacer daño.
¿Hoy hay menos creyentes en la Iglesia pero más espiritualidad en la sociedad?
La espiritualidad sin religión es como una tortilla sin huevos. Yo no soy un místico, soy creyente, católico...
¿Qué diferencia hay entre ser religioso y ser espiritual?
Hoy la gran tentación frente a la religión no es el ateísmo, es la espiritualidad...
¿No le gusta el mindfulness ?
Ser ateo es muy difícil. En cambio, hoy es fácil caer en el panteísmo en boga que identifica a Dios con la totalidad del mundo y que trata de meditar sobre ella.
¿Qué ha hecho mal la Iglesia católica para que se vacíen las iglesias?
La historia de la Iglesia católica no es muy brillante, especialmente en la época moderna. Hubo mucha más libertad en ella durante la edad media.
¿Por qué se perdió esa libertad?
Hubo un momento en que la Iglesia tuvo miedo a la modernidad y se atrincheró en una serie de subculturillas sin nexo con la gran cultura moderna que eran un pecado contra la inteligencia. Y si el catolicismo se defendía de la modernidad, la modernidad le pagó con la misma moneda.
¿Y ahora va bien?
La Iglesia mejoró con el Concilio Vaticano II, que recuperó valores universales que los papas anteriores habían condenado, como los derechos humanos, la libertad religiosa, la tolerancia... Y hoy, en conjunto, está mejor que antes del Concilio.
¿Fuera del catolicismo los cristianismos están mejor que dentro?
Para nada. Las iglesias cristianas fuera del catolicismo se han desintegrado...
¿La católica sigue siendo universal; sus cismas eran nacionalistas?
Y muchas de esas iglesias cristianas no católicas han acabado siendo sectas mientras la gran virtud de la católica era haber aprendido a integrar cierta diversidad.
¿Sus versos místicos preferidos?
La primera estrofa del cántico espiritual: “¿Adónde te escondiste/amado, y me dejaste con gemido?/Como el ciervo huiste,/habiéndome herido;/salí tras ti, clamando, y eras ido”. San Juan está en la cárcel y esa vivencia traumática le hace evocar la de Jesús en la cruz cuando exclama: “¡Dios mío, Dios mío!, ¿por qué me has abandonado?”.
¿Por qué está san Juan en la cárcel?
Por las peleas entre carmelitas descalzos y calzados. Santa Teresa le había convencido de su reforma y él acabó encarcelado dos veces por los calzados; en la primera le liberó un nuncio favorable, pero en la segunda, otro contrario a la reforma lo encerró nueve meses, que dedicó a escribir, hasta que logró escapar descolgándose por un muro.
¿Se jugaban poder, influencia y riqueza?
San Juan era un místico extraordinario. Todos somos hijos de los versos que aprendimos de jóvenes y esos eran los míos hasta que, hace 30 años, los leí traducidos al catalán con un criterio desafortunado que no respeta su música...
¿Y se puso usted a traducirlos?
No pude evitarlo.
¿Qué hace mística a una poesía?
Los poemas místicos se diferencian de los religiosos en que expresan una experiencia profunda, que puedes llegar a intuir...
Denos un ejemplo de su traducción.
“ I tots aquells que vaguen / em van de tu mil gràcies cantant,/ i més i més em llaguen ,/ i em deixa agonitzant / un no sé què que es queden caquejant ”. Se puede leer como prosa, como texto místico, como laico o como erótico, porque en ningún sitio sale ni Dios ni Cristo. Y tiene fuerza.
