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Francesca Giannone,
“Albahaca, piñones, aceite, ajo, sal, pecorino, mortero y... ¡machaca!”
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Dato Turashvili,
“Secuestraron aquel avión para ser libres, no eran unos bandidos”
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Yoshiko Tazawa,
“Al amanecer, el mundo me besa en tu boca, mujer”
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Francesco Piccolo
“Felicidades e infelicidades minúsculas tejen tu vida”
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Keum Suk Gendry-Kim,
“Llorábamos al recordar cómo llamaba a su mamá al ser violada”
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Paulo Coelho
“Cada encuentro trae en sí una eternidad”
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Sasha Marianna Salzmann
“Lo mejor de ser yo es que cada día puedo decidir quién soy yo”
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Geovani Martins,
“Los mismos blancos que me aplaudían se asustaban de mí”
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António Lobo Antunes
“A los portugueses, Puigdemont nos parece un cobarde”
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Henrique Levy
“Quien salva una vida salva al universo entero”
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José Eduardo Agualusa
“Eres lo que recuerdas, pero... casi todo es medio inventado”
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Elif Shafak
“Los seres humanos no somos: fluimos”
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Ngugi wa Thiong’o
“Ningún ser humano es más ser humano que otro”
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Graziano Graziani,
“Hay micronaciones poéticas, ensoñaciones de libertad”
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Liudmila Petrushévskaya
"De niña mendigué porque era 'enemiga del pueblo'"
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Massimo Gramellini
"Las mamás me acariciaban como a un pobre perrito"
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Federico Moccia
"Escribir es tener buena memoria"
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Jonas Jonasson
"Todos estamos desesperados por saltar por la ventana"
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Michela Murgia
"En los pueblos sardos había una madre en cada esquina"
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António Lobo Antunes
"Que te lean es tu única victoria sobre la muerte"
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Günter Wallraff
"Si no es para mejorar las cosas mi trabajo no tiene sentido"
