La Policía Nacional trata de determinar si Sandra Peña, la menor de 14 años que se quitó la vida la pasada semana tras sufrir acoso escolar en el colegio concertado Irlandesas de Loreto de Sevilla, era también hostigada en redes sociales y a través de aplicaciones de mensajería instantánea. Para ello, según fuentes de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM), los agentes han comenzado a analizar su teléfono móvil con el fin de reconstruir su entorno digital, una pieza clave que podría “arrojar luz sobre lo ocurrido”, tal y como señalaba el delegado de Gobierno de Andalucía, Pedro Fernández.
El caso, por tanto, avanza con cautela y queda a la espera de poder acceder a la totalidad del contenido del dispositivo para poder realizar una radiografía completa de la situación que atravesaba la chica.
Mientras tanto, las investigaciones, dirigidas por la Fiscalía, se concentran en el entorno escolar de la víctima y en tres compañeras de más de 14 años, que podrían ser imputables penalmente si se confirmara su implicación. Y, aunque de momento no se ha resuelto el atestado policial de los hechos y, por tanto, “no se han comunicado los nombres de las menores implicadas” de manera oficial, las redes sociales ya han filtrado sus identidades y sus fotografías acompañadas de mensajes de odio, insultos y amenazas.
Esta exposición ha llevado al Ministerio Público a solicitar a una red social, a través de su sección de Criminalidad Informática, la retirada inmediata de las imágenes. “El acoso no se puede combatir con acoso ni con amenazas”, ha advertido la Fiscalía en un comunicado.
El centro podría perder el concierto
Otra de las aristas de este caso que se mantiene bajo estudio se centra en la depuración de responsabilidades del colegio por este dramático suceso, cuya dirección no activó el protocolo de acoso escolar ni autolítico pese a tener conocimiento de la situación a través de dos denuncias realizadas por la madre, que reforzó su queja con un informe psicológico de la menor el pasado curso y a inicios de este.
Esta actitud por parte del centro podría derivar en sanciones o incluso en la pérdida del concierto educativo, tal y como anunciara la Junta de Andalucía, cuyo presidente, Juanma Moreno, proponía a este mismo martes que las grandes plataformas tecnológicas bloqueen el acceso a las redes sociales a quienes acosen de manera reiterada. “Un menor que haya participado en una campaña de acoso digital no debería tener derecho a usar las redes hasta los 18 años”. El líder político andaluz reclamaba “combatir el acoso escolar de forma más directa y sin excusas”.
Una semana después del fallecimiento de Sandra Peña, el entorno del colegio continúa bajo vigilancia policial para evitar altercados o situaciones de tensión. Las pintadas con mensajes violentos y la difusión en redes sociales de las imágenes de las menores señaladas han motivado un refuerzo de la presencia de agentes en la zona, según fuentes oficiales. Tanto las autoridades como la dirección del centro han pedido serenidad y respeto mientras avanzan las investigaciones.
Los estudiantes convocan una huelga en honor a Sandra Peña
El Sindicato de Estudiantes ha convocado una huelga para el próximo martes, 28 de octubre, en toda España en recuerdo a la joven Sandra Peña, con el lema “Sandra, no te olvidamos”.
Además, habrá manifestaciones a las 12 del mediodía en diferentes ciudades, según ha informado el sindicato, que ha lamentado la muerte de la chica y ha señalado que “no tenía que haberse producido nunca”, y del que “hay responsables”.

