Òrrius y Sant Iscle de Vallalta, en el Maresme, son dos de los doce nuevos municipios que se han incorporado al Estatut de Municipios Rurals, promovido desde noviembre de 2024 y formado por un total de 608 pueblos. Uno de los principales objetivos es prever un refuerzo de la financiación por parte de la Generalitat mediante un fondo específico destinado a los municipios rurales.
Por lo que se refiere al primer año de aplicación del fondo, se ha acordado que los pueblos de entre 500 y 1.000 habitantes recibirán una asignación equivalente al 15% de la cantidad que les corresponda del Fons Local de Cooperació. Por otra parte, se contempla la creación de una línea específica de inversiones para afrontar el envejecimiento y la reducción de la población.

Sant Iscle de Vallalta está ubicado en la Serralada del Montegre Corredor .
El Estatut también promueve la vivienda con deducciones en el IRPF por traslado, rehabilitación o compra de una residencia habitual, además de impulsar incentivos para fomentar la actividad económica en el municipio con ayudas a los emprendedores y los autónomos. Una de las medidas destacadas es la reducción de la carga burocrática mediante la creación de un portal único para simplificar y hacer más ágiles los procedimientos con la administración.
La ley entrará en vigor durante el mes de agosto, después de su publicación en el DOGC, salvo las medidas tributarias que lo harán a partir del 1 de enero. Esta normativa ha sido impulsada por entidades como la Associació de Micropobles de Catalunya, Eines de Repoblament Rural, la Associació Catalana de Municipis y la Federació de Municipis de Catalunya.
El alcalde de Òrrius, Xavier Masgrau, asistió al pleno del Parlament de Catalunya el día de su aprobación, reafirmando así su apoyo a la iniciativa y a la necesidad de poder contar una normativa específica para los pueblos rurales.