El alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales, defiende que Tarragona tenga una estación intermodal propia y asegura que la proyectada en Vila-seca puede hacer que Tarragona tenga menos trenes que ahora.
“Si me dicen que voy a perder más trenes, no la quiero”, expresa, y se basa en un informe externo para afirmar que la ciudad podría dejar de tener las conexiones con Valencia y el R16 procedente de las Terres de l'Ebre.
También avanza que el ministerio de Transportes ya está redactando el estudio de viabilidad de la salida de mercancías del puerto de Tarragona hacia el interior. Asimismo, se muestra optimista respecto a tener terminado el nuevo POUM antes de terminar el mandato y confía en que el contrato de la basura se desbloquee en julio.
Las conexiones ferroviarias han sido uno de los principales focos de atención de los dos primeros años de mandato de Rubén Viñuales como alcalde de Tarragona.
La entrada en funcionamiento del tercer hilo ferroviario supondrá un incremento del paso de los trenes de mercancías peligrosas por el centro de Tarragona.
Algo que ha hecho levantar la voz a la sociedad civil ya los partidos políticos, que alertan del riesgo que supondría para la población y que, de paso, probablemente comportaría una reducción de los trenes de pasajeros y de las conexiones con Barcelona.
”No estamos en contra del tercer hilo, estamos en contra de que nos pasen eternamente las mercancías. Deben dejar de pasar por la fachada marítima y por los campings”, argumenta Viñuales.
Presión al Ministerio
Por eso, está “presionando” el ministerio de Transportes, trabajando con el puerto de Tarragona y con Vila-seca para que los convoyes que salen del puerto no pasen por la ciudad sino que vayan en dirección norte por un nuevo “bypass, una ronda de Dalt ferroviaria”.
“Hace un par de semanas tuvieron una reunión con el presidente del puerto de Tarragona y el alcalde de Vila-seca para hablar de la salida de mercancías y el ministerio ya está redactando a escala 1:5.000 el estudio de viabilidad de la salida de mercancías por el interior”, adelanta. El primer documento que tenían hasta ahora era a escala 1:25.000, lo que permite planificar el nuevo trazado con mayor detalle.
También en materia ferroviaria, en las últimas semanas se ha mostrado crítico con la nueva estación intermodal proyectada entre Vila-seca y Reus.
Viñuales afirma que la ciudadanía de Tarragona perderá y tiene estudios propios que demuestran que el grueso de viajeros está en la ciudad y que esta nueva estación les dificultaría el acceso al tren. Desde el Ayuntamiento de Tarragona han presentado alegaciones en el ministerio. “Deseo que el ministerio nos diga que estamos equivocados, que la intermodal es buena por el territorio y que Tarragona no pierde. Pero no me conformo con no perder. Tarragona tiene que ganar”, expresa.
“No me gustaría que parezca que lahacen allí -entre Reus y Vila-seca- porque es barata y fácil de hacer. Nuestros informes de ingenieros externos nos dicen que Tarragona podría perder incluso los trenes que vienen de Valencia y que el R16, que viene de Terres de l'Ebre, dejaría de pasar por la ciudad”, razona. “Si me dicen que voy a perder más trenes, no la quiero”, exclama.
Por eso, defiende la creación de la estación de Horta Gran, junto al río Francolí. “Es la estación que permite que se puedan coger todos los trenes, porque en Tarragona están los usuarios. Las empresas comercializadoras ponen trenes donde hay gente; y saben que en Tarragona hay dos millones de usuarios de regionales y otros 700.000 que van a la estación de Camp de Tarragona. Es un negocio que seguro que querrán”, defiende.
Respecto al precio, reconoce que sería más cara, por los diferentes enlaces ferroviarios que habría que hacer, pero se pregunta: ”¿que salió bien de precio la de Málaga? ¿O la de Valencia, o la de Girona? ¿Girona puede tenerla y nosotros no? ¿Por qué?”. Todo ello ha generado enfado en Vila-seca y su alcalde, Pere Segura, ha abandonado temporalmente las reuniones de trabajo de la futura Área Metropolitana de Tarragona.