El solar de la calle Músico Ayllón de València, junto a una conocida bolera y frente al Hospital General de València, se ha vallado y presenta movimiento en sus tierras. Los vecinos de este barrio de la zona oeste de València se sorprenden al observar que, tantos años después, se vaya a urbanizar una zona que actualmente sirve de improvisado aparcamiento y que colectivos de migrantes, principalmente, han aprovechado habitualmente como zona de ocio los fines de semana. En los años 70 fue el suelo donde se construyó un edificio para funcionarios municipales y sus familias, pero que hubo de demoler por problemas estructurales en los 80. Desde entonces no había nada.
El espacio vallado pertenece al barrio de l'Olivereta de València, uno de los menor renta por hogar de la ciudad y especialmente degradado. En la pasada legislatura, el consistorio planeó su mejora -en eficiencia energética y regeneración urbana, entre otros aspectos- a través de los fondos Next Generation, pero con el cambio de gobierno no se ha vuelto a saber nada. El proyecto incluía también la regeneración del barrio de Tendetes.
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El solar, un suelo residencial privado, ya estuvo en el punto de mira de las constructoras y en 2016 fue objeto de un estudio de detalle para regular los volúmenes aprobados permitidos dentro de la parcela que fue aprobado por el Ayuntamiento para desarrollar 315 viviendas. Hasta ahora.
La semana pasada la propiedad anunciaba que se convertirá en un gran complejo, llamado “Residencial Montreal”, dotado con 510 viviendas destinadas al alquiler. La promoción está impulsada por Azora y contará con amplias zonas comunes y servicios que ofrecerán un “elevando estándar de calidad de vida a sus residentes”, apunta Grupo Avintia, responsable del mismo. El proyecto, según la empresa, tendrá un plazo de ejecución de 30 meses y se convierte en “promoción clave” para la delegación Levante de Avintia que, con la firma de este contrato, estará construyendo más de 1.740 viviendas en la Comunidad Valenciana.
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El barrio no cuenta con promociones nuevas desde que en 2003 se construyera el último residencial junto a la parroquia
“Residencial Montreal” incluirá piscina, pista de pádel, zonas de juegos infantiles y espacios verdes, además de un gimnasio, una sala de usos múltiples y un área de coworking. También se habilitarán 510 plazas de aparcamiento para bicicletas, siguiendo la tendencia de las nuevas construcciones. Será la primera gran promoción urbanística del barrio desde que en 2003 se alzara otro edificio en un solar propiedad de la parroquia aledaña, y donde desde entonces sus bajos comerciales han permanecido vacíos. Ahora se convertirán en pisos turísticos.
Edificio de viviendas construido en 2003 en L'Olivereta de València
Con la promoción que Grupo Avintia ha anunciado en L'Olivereta este mes de abril el barrio aumentará su oferta de alquiler un 980%, aproximadamente. Y es que según datos de la UPV, la oferta de alquiler residencial en el barrio en los últimos trimestres no supera las 50 viviendas con un precio medio, además, que ya bordea los 1.200 euros. Hay casos de pisos, ubicados en inmuebles de la Antigua Obra Social, por los que se piden hasta 1.300 euros, muestra de la tensa situación inmobiliaria que vive la ciudad y que ha motivado a asociaciones vecinales de la zona a unirse para denunciar la situación.
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La promoción de Grupo Avintia podría activar un mercado, el de venta libre, especialmente adormecido en l'Olivereta, donde el análisis de vivienda efectuado por la UPV recoge que en los últimos tres trimestres solo ha habido un piso en venta y el precio medio alcanzaba los 3.466 €/m². Traducido, supone que un piso de 90 metros se paga en esta barriada de València, surgida en los años cincuenta y sesenta junto a la Avenida del Cid, a más de 300.000 euros.
