En la argumentación de su negativa a requerir el acta de la CHJ del 19 de diciembre de 2024, la jueza instructora de la causa de la dana recuerda que la competencia de la vigilancia de los barrancos correspondía a la Generalitat Valenciana y menciona un dato relevante: entre las 16.45 y las 17.30 -la reunión del Cecopi comenzó a las 17 horas- varias personas fueron arrastradas por las aguas en los cauces de los barrancos tributarios del Poyo.
La instructora recuerda que la vigilancia del caudal de barrancos debía hacerse por los directores del plan (la Conselleria de Emergencias de la Generalitat), incluido el día 29 de octubre, “como estampó de su puño y letra” la investigada Salomé Pradas, refiriéndose al barranco del Poyo, y como lo pone de manifiesto igualmente la movilización de los bomberos forestales y el intento de movilización, en el día 28 de octubre, de agentes medioambientales de la Conselleria de Medio Ambiente, de los que no consta que se hiciera uso el día 29 por la Conselleria de Emergencias”.
“No consta vigilancia de caudal respecto de los barrancos tributarios del Poyo”, afirma la magistrada
A ello se añade, explica la jueza, “que no consta vigilancia de caudal respecto de los barrancos tributarios del Poyo, cuyas aguas desembocaron en dicho barranco aguas abajo del caudalímetro situado en la A-3, y que fallecimientos producidos por ahogamiento de las aguas de barrancos afluentes del Poyo, tuvieron lugar por el arrastre del agua, en Godelleta, en Turís, en Torrent, entre las 16:45 y las 17:30 horas, aproximadamente, atendiendo a las declaraciones de los perjudicados”.
Ello coincide, señala Ruiz Tobarra, “con el análisis que se efectúa en el 'Estudio cronológico de los volúmenes de precipitación en las subcuencas de la rambla de Poyo en el episodio del 29 octubre de 2024', que fue publicado, en fecha de 23 de julio de 2025, en el número 84 de la revista Investigaciones Geográficas, del Instituto Interuniversitario de Geografía, de la Universidad de Alicante”.
Dentro de dicho estudio se reconstruye la precipitación horaria y se analiza su volumen en las subcuencas de la rambla de Poyo y del barranco de la Saleta. Se hace constar que la aportación del agua no aforada es importante, en especial, en la segunda fase de riada de la rambla de Poyo, la más crítica. Los volúmenes aportados por la parte no aforada de la rambla en esta segunda fase son equivalentes en magnitud a los aportados por las subcuencas de aguas arriba del único aforo existente.
De este estudio se desprende que entre las 7 y las 8 horas del día 29 de octubre ya se alcanzan intensidades horarias cercanas a 50 mm en las cabeceras de las cuatro subcuencas básicas (Grande, Chiva, Horteta y Gallego). Esta fase de lluvias se centra en Turís, tiene su máxima intensidad entre las 8 y las 9 horas. En la fase de lluvias de la mañana los valores superiores a un hm3 se alcanzan ya en todas las subcuencas de la parte baja (Gallego y Horteta), así como en la parte alta y media (Chiva, Grande y Poyo-medio).
Entre las 7 y las 8 horas del día 29 ya se alcanzan intensidades horarias cercanas a 50 mm en las cabeceras de las cuatro subcuencas básicas
Pero es a partir de las 9 horas cuando se superan valores de 2 hm3, sobre todo en las subcuencas de cabecera (Grande y Chiva). La fase de lluvias con aportes superiores a un hm3 es de tres horas (de 8 a 10 horas), con máximos a las 9 horas. En conjunto, en estas tres horas, en toda la cuenca de Poyo se registran unos 24 hm3, y son ligeramente superiores las aportaciones en la parte superior de la cuenca, que aguas abajo.
Tras este episodio de lluvias, que decae mucho ya a las 11 horas, sigue una fase casi sin precipitaciones en ninguna parte de la cuenca (de 12 a 15 horas), pero rápidamente se inicia una segunda tanda de precipitaciones, sobre todo en la parte media y baja de la cuenca.
La segunda fase de lluvias horarias empieza a las 15 horas. A esta hora ya se superan intensidades de 60 mm en observatorios de la cabecera del barranco de l’Horteta y de 120 mm en la hora siguiente. Así, a las 16 horas, la subcuenca de Horteta ya registra un aporte pluviométrico de 2,78 hm3, seguida de la subcuenca de Gallego (1,96 hm3).
Pero es a partir de las 17 horas, hasta las 20 horas, cuando se producen los máximos aportes pluviométricos: En estas tres horas la subcuenca de Horteta recibe 20,7 hm3. La siguiente subcuenca en importancia es la de Gallego, con 18,3 hm3, seguida de la de Poyo medio, con 14,4 hm3. Horteta es la subcuenca con más aportaciones de agua precipitada en una hora (9,0 hm3, de cinco a seis de la tarde), y solo empieza a declinar a las 20 horas. A esta hora es superada ya por las tres subcuencas de Poyo antes del aforo, e incluso por la de Gallego.
La subcuenca de Horteta, por tanto, es la que empieza antes a recibir las grandes aportaciones pluviométricas de la tarde, la que registra un mayor volumen de precipitación horaria y la que empieza antes a declinar.
En la fase crítica de la riada, la catastrófica de la tarde del 29 de octubre, los aportes de precipitación de 16 a 19 horas son mayores en la parte de cuenca aguas abajo del aforo que en la parte de cuenca aforada. La precipitación comenzó a registrar fortísimos volúmenes en las cuencas de Horteta y Gallego al menos una hora antes de hacerlo en las cabeceras de Poyo. Solo la parte baja de la cuenca aforada, la que se extiende tras la confluencia de los barrancos Grande y Chiva en Cheste (subcuenca de Poyomedio), tuvo un comportamiento pluviométrico similar al de la parte no aforada, pero sus inputs no llegan a alcanzar ni un tercio del total.
La hipótesis más probable, según concluye dicho informe, es que la escorrentía que llegó primero a l’Horta Sud fue la generada en la subcuenca del barranco de l’Horteta, con la aportación de Gallego y de la parte baja de la cuenca de Poyo.
Añade el citado informe que lo que seguro no ocurrió en la riada catastrófica de la tarde del 29 de octubre de 2024 en el abanico aluvial de la rambla en l’Horta Sud es que la responsabilidad principal fuera de las cabeceras de Poyo, que tuvieron unos aportes más tardíos y más alejados del punto apical de este abanico.



