El gobierno valenciano está trabajando en planes de contingencia por si la peste porcina llega a territorio valenciano. Lo ha explicado el conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina, ahora también portavoz del Consell, en su primera rueda de prensa, donde no ha querido dar detalles del mismo, pero ha remarcado que igual que “hemos hecho todo el trabajo previo, estamos con el plan de prevención e incluso tenemos planes de contigencia previstos por si esa situación tuviese lugar”. Barrachina ha explicado que no hay lugar para la preocupación en las granjas valencianas, aunque sí ha remarcado el drama que supondría que la peste se extendiera hasta ellas: “Ahora no nos afecta, pero si es verdad que podría arruinar a un sector del que nos enorgullecemos: el porcino representa el 50% de la actividad ganadera de la Comunidad Valenciana”.
Ese trabajo preventivo del que ha dado cuenta se refiere a los 2.600 análisis, “todos negativos” en ganado porcino, así como los realizados a 2.500 a jabalíes silvestres y a los más de 2.000 ejemplares ubicados en granjas de la Comunidad Valenciana. “Afortunadamente en la Conselleria de Medio Ambiente hicieron sus deberes: hoy se caza mucho más, hay más métodos y, por tanto, los 58.000 jabalíes abatidos en la última temporada suponen un récord histórico”, ha señalado Barrachina.
“Los 58.000 jabalíes abatidos en la última temporada suponen un record histórico”, ha señalado Barrachina
El plan de trabajo del gobierno valenciano parte de la colaboración de ambos departamentos con la Federación de Caza para incrementar las batidas además de colocar jaulas de captura y reducir así la población de jabalíes salvajes, calificada de superpoblación en 440 municipios valencianos. Un escenario del que culpabiliza al gobierno del Botànic, “que limitó la caza y la demonizó y ahora pagamos sus consecuencias”.
Parte del plan de prevención consiste en medidas preventivas - “más caza y más análisis”, ha dicho-, además de aplicar un plan específico de prevención que “está arbitrando las fórmulas para la caza adicional en entornos sensibles con los límites con Catalunya”.
Sin embargo, la Unió Llauradora i Ramadera reclama de nuevo a la Conselleria de Agricultura un protocolo de actuación y un calendario de implementación de medidas pues dicen que, después de la reunión del pasado lunes entre la Vicepresidencia de Medio Ambiente, la Conselleria de Agricultura y la Federación de caza se ha generado una “profunda inquietud entre los ganaderos y veterinarios”, porque “esperaban ser informados y consultados de manera prioritaria en una cuestión estrictamente sanitaria y de máxima trascendencia económica”.
Consideran que el gobierno valenciano debería reforzar los límites territoriales más allá de la AP-7, como explicaron tras la reunión del lunes. Creen que es necesario actuar sobre las poblaciones silvestres, pero que “el riesgo de entrada de la peste porcina africana no se limita a esta vía. Las carreteras N-340, N-332 y otros ejes viarios donde circulan camiones de ganado, transportistas y viajeros son rutas de igual o mayor riesgo”.
“Las rutas por las que circulan camiones de ganado, transportistas y viajeros son rutas de igual o mayor riesgo que la AP-7”, dice La Unió sobre el plan de prevención
“Limitar la estrategia a una sola infraestructura crea una falsa sensación de protección a juicio de la organización y no se ajusta a los criterios técnicos establecidos por la Unión Europea en materia de bioseguridad trazabilidad del movimiento de animales y productos”, argumentan desde la organización agraria. Es por ello que piden que se haga público, “a la mayor brevedad”, el protocolo completo que la Generalitat pretende aplicar para evitar la entrada de la peste porcina africana en la Comunitat Valenciana, incluyendo actuaciones en carreteras principales (AP-7, N-340, N-332 y otras), aeropuertos, puertos y puntos logísticos.


