Eva Collar, esteticista: “No todas las zonas del cuerpo son iguales, y en algunas de ellas puede ser más difícil eliminar la grasa pese a haber mantenido hábitos saludables el resto del año”
Belleza
La fundadora de los Centros de Estética Marquessa explica cuáles son los beneficios de la criolipólisis, un tratamiento que ayuda a reducir la grasa localizada
La modelo Candice Swanepoel
Muchas mujeres llevan prácticamente todo el año realizando tratamientos estéticos para llegar al verano con un cuerpo mucho más definido. Una de las preocupaciones más comunes es la grasa localizada que cuesta mucho de eliminar aunque se practique ejercicio con regularidad y se siga una dieta mediterránea.
Para abordar este problema estético, desde hace años muchos centros realizan la criolipólisis, un tratamiento que se ha consolidado como una de las técnicas más eficaces cuando se buscan resultados efectivos. “La criolipólisis consiste en un procedimiento no invasivo que reduce la grasa localizada a través de la aplicación de frío controlado. A través de ella, y debido a que son muy sensibles, las células grasas se cristalizan, lo que se conoce también como proceso de apoptosis. A partir de ello, la grasa se va eliminando naturalmente de forma gradual a través del sistema linfático”, explica la esteticista Eva Collar.
Eva Collar, esteticista y fundadora de los Centros de Estética Marquessa
La fundadora de los Centros de Estética Marquessa expone que este tratamiento es el complemento perfecto para potenciar los resultados de seguir una buena alimentación y de practicar ejercicio. “No todas las zonas del cuerpo son iguales, y en algunas de ellas puede ser más difícil eliminar la grasa pese a haber mantenido hábitos saludables el resto del año. Para ello esta técnica reductora sobresale de otras porque puede aplicarse tanto en zonas pequeñas como los brazos o el doble mentón, así como en zonas más grandes con un patrón de grasa más difuso como el abdomen o los muslos”, señala la profesional.
Esta técnica reductora sobresale de otras porque puede aplicarse tanto en zonas pequeñas como los brazos o el doble mentón, así como en zonas más grandes con un patrón de grasa más difuso como el abdomen o los muslos”
Esta técnica se puede realizar perfectamente en estas semanas del año porque no requiere ningún tipo de reposo y se puede seguir con la rutina habitual. Como afirma Collar, los resultados se aprecian rápidamente, en la mayoría de casos, se necesitan entre 1 a 3 sesiones para comprobar que la grasa está desapareciendo.
La criolipólisis es uno de los tratamientos más efectivos para eliminar la grasa
“La criolipólisis no provoca un efecto rebote, siendo así sus efectos duraderos, siempre y cuando se mantenga un estilo de vida saludable con dieta equilibrada, ejercicio regular, una adecuada hidratación y el cuidado de la piel, evitando la exposición directa al sol y masajeando la zona tratada para mejorar su apariencia y así optimizando el resultado”, agrega.
Al contrario de lo que muchos piensan, este tratamiento no duele a pesar de que se utilice frío para reducir la grasa. “Aunque alcanza una temperatura de hasta -10ºC, en ningún momento compromete la integridad de los tejidos superficiales. En nuestro caso, esto se debe a que a las membranas que utilizamos se les agrega un gel con principios crioprotectores y calmantes que garantiza la acción exclusiva sobre el tejido graso de aquellas zonas específicas que queremos tratar, sin dañar otras capas más superficiales de la piel, sintiendo solo una sensación de enfriamiento los 5 primeros minutos”, afirma.