Loading...

Marian Rojas explica la clave para educar a los hijos sin gritos ni castigos: “Educar con respeto y empatía fortalece la autoestima”

Límites claros

La experta en salud mental detalla cómo la comunicación positiva, el establecimiento de límites claros y la resolución de conflictos pueden transformar la crianza sin recurrir a gritos ni castigos

El psicólogo Chris Núñez explica los cuatro pasos fundamentales para combatir la ansiedad y la depresión: "Tenemos el control”

Marian Rojas destaca la importancia de una crianza basada en el respeto para prevenir problemas emocionales en la infancia y la adultez 

Educar sin recurrir a los gritos ni a los castigos es posible y, según la psiquiatra Marian Rojas, es fundamental para el desarrollo emocional de los niños. En un análisis basado en estudios de prestigiosas universidades, la experta destaca la importancia de la comunicación positiva, el establecimiento de límites claros y la resolución de conflictos de manera constructiva como pilares de una crianza efectiva y saludable.

Comunicación positiva

La clave para fortalecer la autoestima infantil

La especialista subraya que el uso del miedo y la intimidación en la educación infantil puede generar consecuencias graves en la salud mental de los niños. “Los estudios han demostrado que los niños que crecen en un ambiente donde el grito es común tienen un mayor riesgo de desarrollar trastornos de ansiedad y depresión en la adolescencia y la adultez”, advierte.

Según Marian Rojas, establecer límites claros sin recurrir a gritos favorece la seguridad y el desarrollo emocional de los niños 

Uno de los pilares de esta crianza respetuosa es la comunicación positiva, una herramienta clave para reforzar la autoestima infantil. En lugar de frases negativas como “deja de hacer tanto ruido”, Rojas propone una reformulación más respetuosa: “Me encanta cómo te diviertes jugando, ¿podrías hacerlo un poco más suave?”. Según la experta, este enfoque mejora la relación entre padres e hijos y fomenta un ambiente emocionalmente seguro.

Otro aspecto fundamental es el establecimiento de límites claros sin recurrir a la agresión verbal. “Brindar a los niños un marco seguro y comprensible les ayuda a desarrollar habilidades de autorregulación y a entender la importancia de la responsabilidad sin sentirse amenazados”, explica Rojas. Establecer normas coherentes permite a los niños entender qué comportamientos son aceptables, promoviendo la cooperación en lugar del miedo.

Lee también

Por qué castigar a tus hijos no funciona, según una experta en crianza

Alexandra Roiba

Por último, la resolución de conflictos de manera constructiva es esencial para fortalecer la comunicación familiar. Rojas enfatiza la necesidad de modelar un diálogo respetuoso y enseñar a los niños estrategias efectivas para resolver problemas sin recurrir a gritos o castigos. “Cuando los padres muestran cómo manejar los conflictos con respeto y empatía, los niños internalizan esos comportamientos y los replican en su vida cotidiana”, destaca.

En definitiva, educar desde la empatía y el respeto no solo favorece el bienestar emocional de los niños, sino que también fortalece los lazos familiares. Como concluye Marian Rojas, “cada esfuerzo por mejorar nuestra forma de criar contribuye a construir generaciones más saludables y equilibradas”.