Likán, experto en salud natural: “Comer kiwi antes de dormir mejora tu descanso, repara tu ADN y acelera el tránsito intestinal”
Nutrición funcional
Un ‘health coach’ destaca los beneficios del kiwi, y la ciencia lo respalda: su poder antioxidante y digestivo lo convierte en un posible superalimento
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Likán, experto en salud natural, defiende el consumo diario de kiwi como gesto clave para mejorar el bienestar general
Un kiwi. Solo uno. Ese es el gesto que el experto en salud natural Likán recomienda incorporar cada día si queremos dormir mejor, mejorar la digestión y, sorprendentemente, reparar el ADN dañado que nuestro cuerpo acumula a diario. Aunque suene exagerado, la ciencia ha empezado a validar lo que en redes sociales se presenta como consejo práctico y natural.
“Nuestro ADN sufre rupturas todos los días. Es muy frágil, se rompe hasta por respirar”, explica Likán en un vídeo publicado en su cuenta de TikTok (@likan.vital). Esa fragilidad celular es, de hecho, uno de los mecanismos naturales del envejecimiento. Y es aquí donde entra el kiwi.
“La revista Carcinogenesis encontró que comer un kiwi al día mejora la capacidad del cuerpo para reparar el ADN. Lo puede reparar hasta en un 60 %”, señala el experto. Aunque a priori suene a titular sensacionalista, el dato está respaldado por un estudio publicado en la prestigiosa revista científica Carcinogenesis en 2001. En él, investigadores de Nueva Zelanda analizaron cómo la ingesta diaria de kiwi podía ayudar a reducir el daño oxidativo en el ADN. Los resultados mostraron una mejora significativa en la capacidad de las células para reparar roturas, especialmente en adultos sanos.
Este tipo de daño, relacionado con procesos como el cáncer, el envejecimiento y algunas enfermedades crónicas, es normalmente difícil de revertir. Por eso, una fruta con este potencial se ha convertido en objeto de estudio en nutrición celular.
Un kiwi al día te mantiene joven y vital”
Pero los beneficios no acaban ahí. Según Likán, el kiwi también puede mejorar la calidad del sueño, especialmente si se consume por la noche. “En este estudio, atletas de élite comían dos kiwis una hora antes de dormir. Y tanto la duración como la calidad del sueño mejoraron drásticamente”, afirma.
En efecto, un estudio de 2011 realizado por investigadores del Taipei Medical University Hospital y publicado en Asia Pacific Journal of Clinical Nutrition probó este hábito con adultos que sufrían problemas de sueño. Tras cuatro semanas comiendo dos kiwis una hora antes de acostarse, mejoró la eficiencia del sueño, aumentó el tiempo total dormido y disminuyeron los despertares nocturnos. El alto contenido en serotonina natural del kiwi parece ser una de las claves.
Tránsito intestinal y digestión
Una enzima poderosa
En el mismo vídeo, Likán añade un beneficio más al kiwi: su efecto sobre la digestión. “Si estás estreñida, el kiwi te va a ayudar con tu tránsito lento. Comer dos kiwis al día ayuda con el síndrome del intestino irritable causado por el estreñimiento, gracias a una maravillosa enzima que se llama actidina”.
Esta enzima, también llamada actinidina, ha sido investigada por su capacidad para descomponer proteínas en el sistema digestivo, facilitando así el vaciado intestinal y reduciendo la sensación de pesadez. Su eficacia ha sido avalada por estudios como el publicado en Advances in Food and Nutrition Research (2013), donde se concluye que el consumo de kiwi verde puede mejorar notablemente el funcionamiento intestinal sin efectos secundarios adversos.
El picor en la lengua que muchas personas experimentan al comer kiwi, explica Likán, está relacionado con esa misma enzima y no supone ningún riesgo. “Es natural y no hay nada de qué preocuparse. Se trata de la enzima que va a vitalizar tu digestión”.
A todo esto se suma su impresionante perfil nutricional: “Un kiwi tiene más vitamina C que una naranja o un jugo de limones, y más de 20 antioxidantes distintos para mejorar tu piel, vivir más y estar vital”, añade Likán. Y no le falta razón.
Según datos de la Fundación Española de la Nutrición, 100 gramos de kiwi aportan el 112 % del valor diario recomendado de vitamina C, superando en muchos casos a los cítricos. Además, su combinación de fibra, potasio, ácido fólico y antioxidantes lo convierten en un aliado para la salud cardiovascular, inmunológica y dermatológica.