No cabe duda de que la sandía es la fruta indispensable del verano, perfecta para refrescarse y ayudar a mantener la hidratación durante los días de más calor del año. Además, se trata de una fruta que aporta varios beneficios al organismo. Entre las propiedades de la sandía se encuentra su concentración en antioxidantes, efectos positivos en la salud cardiovascular y también está considerada como un remedio para las agujetas, gracias a sus calidades antiinflamatorias y analgésicas.
El problema viene cuando hay que acudir al supermercado a elegir una que esté bien madura y dulce, una tarea complicada si no se puede ver su interior. O al menos, esto podría pensarse. Afortunadamente, existen trucos infalibles para elegir la mejor sandía sin arriesgarse.
¿Cómo elegir la mejor sandía con estos trucos?
Rubén García, experto en Nutrición y deportista, despeja los dudas sobre este asunto. A través de un vídeo publicado en su perfil de la red social de Instagram, donde ya acumula más de 1,4 millones de seguidoras, comparte una serie de consejos para no fallar al elegir una sandía. “Estos son trucos que me dio mi abuelo y, hasta ahora, no me han fallado”, asegura. Estos se basan en identificar principalmente dos indicadores que pueden ofrecer valiosas pistas sobre el estado del interior de la fruta y qué tan dulce es.
El primero de ellos consiste en distinguir entre la parte superior y la inferior, aunque en la que será necesario fijarse es la segunda. En la zona de debajo de la sandía se puede apreciar un círculo, que es el que estuvo en contacto con la tierra durante su tiempo en cultivo y arroja información relacionada con su punto de maduración. Rubén García recomienda fijarse en esta característica y evitar aquellas sandías que presentan uno de mayor tamaño. Lo ideal será encontrar un cono una marca de menor tamaño. “Cuando el círculo es grande, no nos interesa, hay que buscar el círculo más pequeño”, señala. Esto se debe a su asociación con un tiempo de maduración en el suelo más prolongado, y, por tanto, un mayor dulzor.
El segundo factor clave para quitarse en casa la mejor sandía se basa en analizar las tachas que presenta la fruta. Algunas personas tienden a lanzarse a miedo aquellas que presentan una apariencia más 'perfecta', es decir, sin marcas ni tachas. Sin embargo, esto es un clásico error. “Las manchas amarillas son un señal de que ha pasado tiempo reponiendo al sol en el suelo”, revela el experto en Nutrición. Pero no son las únicas a las que conviene prestar atención. “Las manchitas marrones son un señal de que las abejas la han polinizado u otros insectos han pasado por ahí por lo dulce que es”, explica.