La psicóloga Nuria Roure, primera psicóloga española acreditada Sommologist por la European Sleep Research Society y experta en trastornos de sueño de alto rendimiento ha lanzado una contundente reflexión sobre la crianza de los más pequeños de la casa. A través de un vídeo publicado en su perfil de Instagram, la especialista ha querido advertir a madre y padres sobre el fenómeno 'vamping'.
''Vamping no es un término de moda. Es una de las causas silenciosas del mal descanso en miles de personas'', comenzaba diciendo. Se trata de un hábito cada vez más común en la población que consiste en quedarse con el móvil, la tablet o la tele hasta altas horas de la noche. ''Sabes que deberías estar durmiendo. Pero no puedes parar'', aseguraba.
Según la experta en sueño, todos cometemos el error de justificarlo con la frase ''solo un rato más''. Pero ese rato se acaba convirtiendo en una, dos o tres horas y eso al final acaba pasando factura. ''Tu cerebro sigue activo, tu cuerpo no desconecta…Y al día siguiente, arrastras el cansancio. El vamping no es insomnio. Es un mal hábito que te roba energía, rendimiento, salud y claridad mental'', advertía.
El problema es que este hábito también influye en los más pequeños. ''Si tu hijo adolescente está con el móvil hasta altas horas de la noche y luego no hay manera de despertarlo, eso tiene un nombre 'vamping' y está afectando a su salud mental'', aseguraba. Tal y como explicaba Roure, la luz azul que emite el dispositivo tiene un función: activar el cerebro y evitar que empiece a segregar la hormona de la melatonina, la encargada del sueño.

Mirar el móvil antes de dormir perjudica a la calidad del sueño.
''Esa activación lo único que hace es que acaben durmiendo con más hiperactivación y por lo tanto tengan un sueño menos reparador'', explicaba. Y esto tiene consecuencias al día siguiente: más cansancio físico, más falta de concentración y peor estado de ánimo. La buena noticia es que se trata de un hábito que se puede cambiar.
Según la psicóloga, no se necesitan pastillas para hacer frente al 'vamping', sino tomar una firme de decisión. ''Cierra pantallas una hora antes de dormir'', aseguraba. Este simple hábito marcará sin duda un antes y un después en la rutina de sueño. ''Haz la prueba durante 5 días. Tu cuerpo notará la diferencia'', concluía.