Esther Gómez, enfermera: ''Se estima que un 30% de la población mundial se muerde las uñas. A nivel físico, causa sangrado, infecciones y deformación de los dedos y dientes''

Un mal hábito

La experta recomendó a sus seguidores evitar morderse las uñas para prevenir consecuencias graves

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Esther Gómez, enfermera

Esther Gómez, enfermera

Instagram/@mienfermerafavorita | Pexels

Morderse las uñas es una práctica muy común en todo el planeta, presente tanto en niños como en adultos. Tal como señaló la enfermera Esther Gómez en una de sus últimas publicaciones en Instagram, plataforma donde acumula más de 394.000 seguidores, esta conducta recibe el nombre de onicofagia y afecta a casi el 30 % de la población mundial.

Pese a que se considera una práctica inofensiva, puede ser síntoma de episodios de estrés, ansiedad y otros factores emocionales. En la publicación mencionada anteriormente, la conocida sanitaria profundizó en este hábito y explicó que, a largo plazo, morderse las uñas puede causar graves daños en el organismo, por lo que es necesario dejar de ignorarlo y poner remedio.

Gómez señaló que, entre las causas que llevan a las personas a morderse las uñas se encuentran el miedo y el estrés, pero también la baja autoestima y la timidez. Además, señaló que este hábito afecta a tres niveles. El primero es el físico, ya que puede provocar sangrado, infecciones bacterianas, verrugas por VPH y deformación de los dedos o los dientes.

A nivel emocional, puede provocar frustración, ya que se trata de una conducta difícil de controlar y muchas personas fracasan en sus intentos de dejarla. Finalmente, a nivel social, las uñas mordidas pueden resultar poco atractivas, afectando así la imagen corporal de la persona.

Una uña desde el microscopio

Una uña desde el microscopio

Instagram/@mienfermerafavorita

Para poner fin a esta conducta, los expertos recomiendan técnicas de relajación y manejo del estrés, como practicar meditación, yoga o actividades recreativas. Si ninguno de estos ejercicios ayuda a la persona a dejar de morderse las uñas, la terapia conductual puede ser la mejor solución.

Un gran impacto

Como era de esperar, el vídeo de la creadora de contenido tuvo un gran impacto y, además de acumular miles de me gusta, generó una oleada de comentarios en el post, donde decenas de usuarios compartieron sus opiniones y anécdotas relacionadas con el tema.

''Hace dos años conseguí dejar de morderlas. Tengo 40'', ''Lo hacía de pequeña y mi madre me restregaba ajos en los dedos para que dejara de hacerlo'', ''He intentado quitarme el vicio durante toda la vida, pero no puedo'', ''Justo me las estaba mordiendo y aparece este vídeo'', ''Lo he intentado mil veces'', ''Yo me las mordía y la única forma de no hacerlo es llevarlas pintadas con esmalte semipermanente'' o ''Si realmente fuéramos conscientes no lo haríamos'' son algunos de los mensajes que se pueden leer en la publicación.

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