Claudia Nicolasa, psicóloga y experta en manipulación emocional: “Cuando empiezan los problemas en una relación de pareja, es fácil que empecemos a buscar fuera lo que nos falta en la relación”

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La psicóloga explica cómo actúa la mente ante los conflictos de pareja y por qué es tan fácil caer en la trampa de una tercera persona

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Claudia Nicolasa, psicóloga y experta en manipulación emocional:

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En momentos de crisis dentro de una relación de pareja, muchas personas comienzan a sentir que algo les falta. Esa sensación de vacío o desconexión puede llevar a mirar hacia fuera en busca de lo que no se está encontrando dentro. Pero lo que muchos no saben es que, en ese proceso, el cerebro puede jugar un papel traicionero.

Claudia Nicolasa, psicóloga y experta en manipulación emocional, explica que cuando una pareja atraviesa dificultades, el cerebro tiende a idealizar a cualquier nueva persona que aparece en escena, mientras devalúa a la pareja actual. “Nuestro cerebro es un poco malvado en ese sentido”, afirma, “porque la persona nueva, como aún no la conocemos bien, no tiene defectos. Todo es idealización”.

Reflexión, no impulso

La trampa de la idealización

Este fenómeno no es casual. Según Nicolasa, cuando una relación comienza a desgastarse, se activa un mecanismo automático que busca fuera lo que ya no se experimenta dentro. El problema es que esta búsqueda está filtrada por una percepción distorsionada: “Creemos que hemos encontrado a la persona definitiva y que nuestra pareja ya no vale para nada”.

Pero esta percepción no dura para siempre. Con el paso del tiempo, la nueva relación comienza a mostrar también sus imperfecciones, y el ciclo se repite. “Muy probablemente terminemos idealizando a la pareja anterior y devaluando a la nueva, cayendo en el mismo patrón”, explica la psicóloga.

El riesgo, según Nicolasa, está en tomar decisiones importantes en medio de este autoengaño. “Si yo no soy una persona reflexiva, si no me he informado sobre cómo funciona mi mente, voy a creer que lo que pienso es verdad”, advierte.

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Por eso, según la especialista, antes de actuar, conviene detenerse a reflexionar, observar los patrones mentales y entender cómo pueden distorsionar la realidad. Reconocer que el cerebro tiende a idealizar lo nuevo y minimizar lo que ya conocemos es el primer paso para no repetir los mismos errores una y otra vez.

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