Con el fin de las vacaciones y los últimos días de verano, llega el tiempo de volver a la rutina y recuperar los hábitos previos a la temporada estival, así como recuperarse de algunos excesos propios de dichas fechas. Estos traen consigo consecuencias frecuentes, como es el caso del aumento del peso. Las barbacoas con los amigos, los helados y el abuso de los productos precocinados, como alternativa para escapar del calor y la pereza de cocinar en casa, son algunas de las razones más comunes de engordar en verano. Se trata de un fenómeno habitual, sobre el que Álvaro Fernández, farmacéutico y nutricionista, habló en uno de sus vídeos, publicado en la red social de Instagram. En este, el especialista compartía su experiencia de haber sumado algunos kilos tras el verano y cómo perderlos, lo que impulsó a algunos usuarios a criticar su mensaje tachándolo de gordófobo. En otra publicación posterior, Álvaro Fernández explica la necesidad de hablar sobre el sobrepeso y la obesidad, por ser riesgos para la salud: “Visibilizarlo, hablar de ello o querer cambiarlo, en o uno mismo o en general, no es juzgar cuerpos, ni provocar un trastorno, ni meterse con nadie”, afirma.
Si se toman como referencia los datos desde 1990, la comparación de las cifras de dicha época y las actuales revela que los casos de obesidad se han duplicado entre los adultos de todo el mundo, y se han cuadruplicado en adolescentes, según asegura la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, la información facilitada por el organismo señala que, en 2022, 2.500 millones de adultos tenían sobrepeso, es decir, el 43% de la población de los mayores de 18 años. Y una de cada ocho personas en el mundo presentaba obesidad, lo que supone un 16% de los adultos. Otros datos más recientes de la OMS afirman que esto afecta igualmente a los niños, dado que 35 millones de menores de 5 años tenían sobrepeso en 2024.
¿Por qué es importante hablar sobre la obesidad y el sobrepeso?
En la mayoría de casos, según la OMS, la obesidad es una enfermedad multifactorial, y su incidencia está considerada como una “crisis mundial”, debido a los efectos negativos que esta conlleva para la salud. Por este motivo, Álvaro Fernández insiste en la importancia de concienciar acerca de estos riesgos: “El problema no es que hablemos del sobrepeso. El problema sería callarlo por miedo a incomodar”. No obstante, el farmacéutico puntualiza la importancia de hacerlo siempre bajo el respeto. “Que hable de sobrepeso no implica que me esté metiendo con la gente con sobrepeso”.
“El sobrepeso tiene riesgos, eso no es una opinión, es ciencia”, apunta. Entre los que se encuentra un mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes, ciertos trastornos neurológicos, patologías respiratorias crónicas, problemas digestivos y cáncer, según la OMS.