La nutricionista Ana Amengual ha explicado, en uno de sus últimos videos subidos a redes sociales, algunos de los motivos menos conocidos sobre la conservación de los huevos y su almacenamiento en los supermercados. “¿Alguna vez te has preguntado por qué en el supermercado los huevos están fuera de la nevera y sin embargo a nosotros nos aconsejan guardarlos dentro? Pues se debe a un tema de seguridad alimentaria”, empieza explicando.
Se debe a un tema de seguridad alimentaria
¿Por qué en el supermercado están los huevos a temperatura ambiente?
Según Ana Amengual, el motivo principal tiene que ver con los cambios de temperatura y la condensación que estos generan. “Si los guardaran en la nevera ellos sería muy peligroso”, advierte. “Imagina por un momento que en el supermercado los encontraras en la nevera. Tienes que sacarlos de la nevera, meterlos en el carro, pagarlos, meterlos en la bolsa, llevártelos a casa... En todo este proceso el huevo se habrá calentado”, explica.
Lo aconsejables es que los huevos se guarden en la nevera
Ese calentamiento produce un efecto físico que puede comprometer la seguridad alimentaria. “Hay una condensación y el huevo, por decirlo de alguna manera, suda y saca agua al exterior”, señala la nutricionista. Esta humedad en la superficie “puede hacer que las bacterias se multipliquen muy rápidamente” y, además, “dañan una capa muy fina que hay en el exterior del huevo que nos protege de que ese huevo no se contamine”.
Por este motivo, los supermercados optan por mantenerlos a temperatura ambiente. “Este proceso supone tal riesgo que por eso el supermercado siempre lo guarda a temperatura ambiente. Así nosotros cuando lleguemos a casa ya los podemos guardar en la nevera”, indica Amengual, destacando que ese cambio controlado evita el riesgo de proliferación bacteriana.
La nutricionista recomienda también tener precaución cuando se viaja o se planea estar fuera del hogar durante unos días. “Si te vas de fin de semana o de puente, yo te recomiendo que compres los huevos una vez allí o de camino y que estén a temperatura ambiente”, aconseja.
Por último, Amengual recuerda la importancia de cuidar la cáscara, una barrera natural contra la contaminación. “La cáscara del huevo es súper importante conservarla, por eso no hay que lavar los huevos y hay que evitar los cambios de temperatura”.

