¿Sabías que se estima que más de un 40% de la población en España tiene déficit de yodo? Júlia Farré, nutricionista, ha desvelado en una reciente publicación en redes sociales cómo solucionarlo con un pequeño gesto diario. La sal es un ingrediente necesario en nuestra dieta. Se utiliza tanto para realzar el sabor de los alimentos como para conservarlos.
Por ello, la sal yodada es la más recomendable, según la OMS (Organización Mundial de la Salud, ya que el yodo contribuye al buen funcionamiento de la tiroides y el desarrollo del cerebro. El problema es que, en España, somos deficitarios de este mineral. ''El 90% de la población debería consumirlo, pero actualmente solo lo hace el 40%'', asegura la farmacéutica Helena Rodero.
En consecuencia, la dietista especializada en dietas de adelgazamiento advierte que cada vez tomamos menos pescado, marisco y lácteos. ''Y es ahí donde está la principal fuente de yodo'', asegura Farré. Este déficit puede tener consecuencias negativas en la salud: ''Tu tiroides puede ir cada vez más lenta. Empiezas a levantarte más cansada, te cuesta concentrarte y el metabolismo va a medio gas''.
El problema, según la nutricionista, es que muchas personas atribuyen estos síntomas al estrés, a un mal descanso nocturno o a la falta de café. ''Pero no es así porque te falta yodo, que es un mineral fundamental para que tu tiroides regule el metabolismo y la energía'', aclara. La buena noticia es que existe una forma fácil y sencilla de conseguir regular este déficit: ''No es tomar suplementos, sino usar la misma sal marina de siempre pero con yodo añadido''.
Cocinero añadiendo sal
En este sentido, la farmacéutica Helena Rodero advierte sobre el consumo de sal del Himalaya: ''Contiene trazas mínimas de yodo, insuficientes para cubrir las cantidades diarias que necesita el organismo''. Por ello, la experta confirma que es más recomendable comprar paquetes de sal con la etiqueta “sal yodada”.
Sin embargo, Rodero aclara que, aunque la sal yodada sea beneficiosa, no hay que consumir más cantidad de la recomendada diariamente, ya que un exceso de sal no es saludable y puede ser perjudicial para la salud.
Consumir lácteos
Por su parte, el doctor Hans Henri P. Kluge, director regional de la OMS para Europa, señaló en un informe oficial de la OMS que el cambio hacia alternativas lácteas de origen vegetal es uno de los principales motivos de esta deficiencia. ''En particular entre las mujeres, que ya tienen un mayor riesgo de deficiencia de yodo y de enfermedades tiroideas que los hombres. Es preocupante, especialmente en los países que dependen de la leche como fuente de este mineral, ya que la mayoría de estas alternativas no lo contienen'', desveló.

