‘Outdoor Mashups’: el nuevo estilo masculino al aire libre
Tendencia hombre
Del hielo alpino al mar urbano: así se visten los nuevos aventureros de la ciudad
Vincent Cassel vestido con equipación de esquí de Moncler temporada de invierno 2025-26
Hace tiempo que el aire libre dejó de ser un espacio vacío. Hoy es un territorio mental que exige una actitud y una identidad capaces de trascender los escenarios. Ya no sorprende ver a hombres cruzando la ciudad con chaquetas que podrían soportar una tormenta alpina y botas pensadas para caminar sobre el barro. No buscan aventura, sino una elegancia nueva que funde asfalto, mar y montaña: un Outdoor Mashup que lo mezcla todo.
La moda masculina ha convertido la funcionalidad en un lenguaje estético. Durante años, el gorpcore fue el refugio de quienes buscaban autenticidad en la era digital. Esa combinación de mochilas técnicas, forros polares y zapatillas de senderismo invadió las calles tras la pandemia. En 2025 la tendencia ha madurado: el hombre del nuevo outdoor ya no quiere parecer un excursionista, sino vestir como si la naturaleza fuera una extensión de su vida. Así nacen los nuevos core mashups, un territorio donde conviven el fisherman, el climber y el tech-nautical.
Parka impermeable, cortavientos y aislante color tierra
Herederos de los pescadores del Atlántico Norte —hombres cubiertos de lana y cera para resistir el viento y el frío—, los nuevos códigos del vestir masculino trasladan esa fortaleza al presente urbano. Las paletas azules oceánicas, grises de niebla, ocres dorados y verdes musgo definen un lujo silencioso, táctil y funcional. En rebelión contra la estética efímera del consumo rápido, celebran la permanencia, el oficio y la calma de lo esencial.
El auge global de marcas como Arc’teryx, And Wander o Snow Peak confirma que la frontera entre el equipamiento técnico y la moda se ha disuelto definitivamente. Según el informe de tendencias de Pinterest 2025, la estética fisherman ha pasado de las redes sociales a las pasarelas, entrando en el radar de las grandes firmas, que combinan tejidos técnicos e impermeables con lanas gruesas y cálidas para construir una nueva forma de autenticidad performativa.
Las colecciones masculinas de 2025 y 2026 confirman una misma intuición: la moda está regresando al paisaje, pero no como simple inspiración, sino como hábitat. La naturaleza ya no se idealiza: se habita, se transporta a lo cotidiano, sin fronteras entre lo laboral y lo íntimo, y sin renunciar a la elegancia. En esa fusión entre función y forma, entre resistencia y refinamiento, se define este nuevo lenguaje del vestir masculino.
Si la montaña fue el primer escenario del nuevo outdoor, el mar se ha convertido en su protagonista más reciente. Aunque desde Jean Paul Gaultier hasta Timothée Chalamet —pasando por Jacques Cousteau— el estilo marinero nunca ha pasado de moda, con sus inmortales rayas horizontales blancas y azules o los jersey Aran, hoy la relación entre el hombre y el mar se vuelve más ecléctica.
Type II Waxed Trucker Jacket el estilo azul marino no pasa de moda
Para la nueva temporada, varias colecciones incorporan referencias literales o simbólicas al mundo náutico: paletas de playa, boat-shoes, jerséis de canalé, chaquetas técnicas y siluetas amplias que evocan el movimiento del agua. Todo ello confirma que la estética costera se traslada a la ciudad. Eso sí, la vida marinera se declina ya en varios registros: si el fishermancore ha convertido el impermeable amarillo del pescador en un símbolo de elegancia smart, el piratecore añade teatralidad y dramatismo al imaginario náutico. Entre ambos polos se mueve el nuevo hombre del mar: técnico y poético, funcional y libre.
'Climber' urbano
El primer arquetipo escala la ciudad con precisión alpina. Salewa, referencia en equipamiento técnico, aporta la base funcional. Desde su colección Alpine Life FW25, la firma italiana propone capas híbridas que combinan lana natural y fibras recicladas, pensadas para moverse entre estaciones y contextos con fluidez.
Sobre esa arquitectura técnica se superpone la visión de Moncler Grenoble FW25, que lleva el performance luxury a su máxima expresión: materiales tratados con precisión, estructura arquitectónica y una paleta mineral de grises, verde glaciar y un trazo rojo. Guantes y máscara de esquí de la misma colección evocan el espíritu de los après-ski más sofisticados. Un reloj Tag Heuer completa el conjunto: precisión, diseño y resistencia convertidos en filosofía urbana.
Máscara de esquí Moncler Grenoble colección hombre
Náutico sofisticado
El segundo arquetipo mira al horizonte. La cápsula Ferrari × North Sails Hypersail lleva la ingeniería automovilística al mar con tejidos Gore-Tes Ocean Pro, refuerzos 4DL y cierres DuraSeal: prendas diseñadas para la tormenta que, desde el océano, desembarcan en la jungla urbana. Para protegerse del viento y del reflejo del agua, unas gafas Oakley son el detalle decisivo.
Prada, en su colección hombre SS26, reinterpreta el universo náutico con ironía y libertad: camisetas de rayas amplificadas, gorros cónicos tejidos, siluetas desproporcionadas y una paleta que va del azul intenso al arena. Bajo su aparente juego estético hay una reflexión sobre la ligereza, el cuerpo y el deseo de soltar el peso de los códigos. Este navegante contemporáneo no busca el mar, lo imagina: viste el humor como elegancia y la libertad como su único lujo.
Estampados de camisetas de rayas amplificadas
'Fisherman heritage'
El tercer modelo vuelve a la costa, a lagos y ríos. La colaboración Barbour × Levi’s, bajo el lema Made with care. Built to last, rinde homenaje a la autenticidad de las prendas de trabajo y del estilo outdoor, combinando tejidos encerados, denim y detalles funcionales en piezas pensadas para resistir el paso del tiempo.
La chaqueta Type II Waxed Trucker Jacket reinterpreta el clásico con cuello de pana, forro tartán y tejido encerado, combinada con una camisa índigo y pantalones verde musgo, unos botines o los zapatos de barco de la colección Barbour Footwear AW25 y una mochila Paul & Shark para guardar provisiones. Entre los accesorios, un gorro encerado y una bufanda de lana —también de Barbour— refuerzan el aire marítimo. Su estilo es funcional pero no utilitario.
Barbour Field Wax 'gorro de pescador'
El auge del outdoor refinado no es una moda pasajera: es una respuesta cultural. En tiempos de incertidumbre, el hombre busca refugio en la solidez. Pero la solidez, hoy, se expresa en la flexibilidad: tejidos técnicos, suelas amortiguadas, impermeables ligeros. La funcionalidad se ha vuelto aspiracional, y hay algo profundamente contemporáneo en esa fusión entre utilidad y belleza.
Es la herencia silenciosa de los pescadores del Atlántico Norte y de los montañeros alpinos: prendas nacidas para durar, convertidas ahora en símbolos de permanencia y pertenencia. Quizá ahí resida el verdadero lujo contemporáneo: saber adaptarse sin perder elegancia ni identidad. El nuevo outdoor core comparte esa ambición: hacer del vestirse un acto consciente, donde técnica y memoria conviven. En las vitrinas, montaña, mar y ciudad se confunden en un mismo gesto: habitar con inteligencia la intemperie cotidiana.