Casi dos décadas lleva El intermedio de LaSexta en emisión. Sin lugar a dudas, uno de los espacios televisivos más asentados de todas las parrillas, en un éxito cada vez más longevo que no se entiende sin la figura de El Gran Wyoming. El humorista, también médico y actor –entre otras tantas facetas–, conduce el espacio desde el primer día. No obstante, y a pesar de las altas cifras de audiencia que el programa vespertino cosecha, todavía hay algunas cuestiones sobre el comunicador que pueden sorprender a la audiencia.
Véase que sus raíces, en realidad, no están directamente en la capital. Y es que a pesar de que él nació en el madrileño barrio de la Prosperidad, su padre es natural de un pueblo turolense del que Wyoming no se olvida: Monreal del Campo. Así lo señalaba en febrero de este año ante los micrófonos de Heraldo de Aragón, durante el 20 aniversario de Radio Calamocha, cuando fue preguntado por lo primero que se le viene a la cabeza al hablar de la comunidad. La respuesta fue clara: ese municipio enclavado en la comarca del Jiloca, cuna de uno de los productos más preciados de la tierra, el azafrán.
El Ayuntamiento de Monreal del Campo.
Monreal del Campo
Un rincón de Teruel que atesora el mejor azafrán del mundo
Con apenas 2.541 habitantes según el INE en 2024, Monreal del Campo presume de un patrimonio natural, histórico y gastronómico que ha sabido conservar sin renunciar a su identidad rural. A 939 metros de altitud y situado entre manantiales naturales, el municipio es reconocido a nivel internacional por el cultivo del azafrán, una tradición que se remonta siglos atrás y que hoy mantiene su prestigio gracias a la calidad de sus tierras y al mimo de sus productores.
La localidad, capital agropecuaria del Jiloca, no solo es famosa por este ‘oro rojo’. Su entramado urbano también ofrece puntos de interés como la Iglesia de la Natividad de Nuestra Señora, con pinturas murales en el presbiterio; la Casa Palacio de Doña Concha o el Museo Monográfico del Azafrán, ubicado en una casa solariega del siglo XVII. Todo en torno a la Plaza Mayor, donde confluyen historia y vida cotidiana.
Pero si algo sorprende al visitante es el entorno que la rodea. Los Ojos del Jiloca, el mayor humedal de descarga de aguas subterráneas de la Cordillera Ibérica, forman un ecosistema único. Este conjunto de manantiales interconectados da lugar a un paisaje sereno y de alto valor ecológico, en el que conviven especies como nutrias, barbos o carrizos. Un enclave que representa, además, el nacimiento natural del río Jiloca y uno de los mayores tesoros medioambientales de Aragón.
Vista de la población.
Su plato favorito
El comunicador no duda al hablar del ternasco, la receta aragonesa que nunca falla
Durante la misma entrevista con el medio antes citado, Wyoming compartió también otra de sus conexiones con Aragón: su plato típico favorito. “El ternasco”, afirmó sin titubeos al ser preguntado por la gastronomía local. Se refería, cómo no, al emblemático cordero de la tierra, una carne de sabor equilibrado que forma parte esencial de la cultura culinaria de la comunidad.
Este producto con Indicación Geográfica Protegida es una constante en celebraciones, casas particulares y cartas de restaurante. Con cortes versátiles y preparaciones tan tradicionales como el asado con patatas a lo pobre, es difícil que falte en las mesas aragonesas. No extraña, por tanto, que el presentador lo mencione como un favorito personal.
