Perder un rasgo físico al que uno se acostumbra durante años puede alterar por completo la percepción que se tiene de sí mismo. En el mundo artístico, esa transformación pesa aún más, porque la apariencia forma parte del personaje que se muestra en público.
En el caso de Goyo Jiménez, su barba no era solo una cuestión estética, sino un elemento que le acompañó casi veinte años y que acabó siendo parte de su identidad. Por eso, cuando tuvo que quitársela para una caracterización televisiva, la experiencia se le hizo difícil de asimilar.
Durante su paso por Tu cara me suena, el programa de Antena 3, el humorista se vio obligado a afeitarse por completo para interpretar a uno de los personajes que le asignaron. En el pódcast A las bravas, con Raúl Pérez, relató cómo vivió ese momento tan exigente: “Dije: No, no, no, me mareé y grité: ¡No quiero ser ese!”. Según contó, la reacción fue inmediata y se debió al impacto de verse sin una parte de su imagen más reconocible.
Goyo Jiménez sorprende a propios y extraños con un inesperado cambio físico: “Ahora tu cara no me suena”
Jiménez explicó que llevaba tanto tiempo con barba que, al mirarse al espejo, apenas reconocía al hombre que veía reflejado. Esa sensación le provocó ansiedad y le costó varios días adaptarse.
Sin embargo, con el paso del tiempo consiguió tomar distancia y encontrarle un punto cómico a la situación. En una entrevista en El Hormiguero, comentó entre risas: “Me dio un ataque de ansiedad, aunque luego se convirtió en una herramienta útil, porque me permitió pedir tres créditos seguidos debido a que nadie sabía quién era”.
Raúl Pérez añadió durante la charla que también había tenido que afeitarse por motivos de trabajo y que comprendía perfectamente la reacción de su compañero. Ambos coincidieron en que la barba “les viene bien y les tapa la papada”, un detalle con el que cerraron la conversación.

