La espectacular cascada de leche que ha provocado un camión cisterna en Asturias
Accidente de tráfico
El accidente generó retenciones importantes en la A-8, obligando a desviar el tráfico por la N-634 en la salida 483
El 'efecto tijera': el camión del atropello mortal en Sevilla habría sufrido este fenómeno
El accidente obligó a cortar la vía de inmediato
El estruendo sacudió la autovía del Cantábrico y, en cuestión de segundos, un torrente blanco se precipitó desde lo alto del puente. No era agua, ni combustible, ni ninguna sustancia peligrosa, sino leche.
Litros y litros derramándose en una escena tan llamativa como poco habitual. El tráfico quedó interrumpido, los conductores observaban atónitos y, en medio del desconcierto, los servicios de emergencia trabajaban a contrarreloj para rescatar al conductor accidentado.
Corte de carretera y desvíos obligados
Un torrente blanco en plena autovía
El origen de este insólito espectáculo fue el vuelco de un camión cisterna que transportaba leche. La estructura del vehículo no soportó el impacto y la carga se precipitó al vacío, generando la llamativa cascada. El transportista, que resultó herido de gravedad, fue trasladado al Hospital de Jarrio, en Coaña, para recibir atención médica, según informó la Guardia Civil.
El accidente tuvo lugar poco antes de las 12:00 horas del sábado 1 de febrero. Tres patrullas de la Guardia Civil de Tráfico y un Equipo UNIS acudieron al lugar para gestionar la situación. Para evitar más complicaciones, se decidió cortar la vía y desviar la circulación hacia la N-634 por la salida 483. Los paneles informativos de la autovía y el sistema Lince alertaron a los conductores de la incidencia.
Desde la distancia, el puente parecía haberse convertido en un extraño manantial de leche. La imagen no tardó en llenar las redes sociales, donde se compartieron vídeos y fotos del insólito suceso.
Más allá del impacto visual, el accidente puso en marcha un despliegue de seguridad y limpieza para evitar que el derrame provocara más problemas en la vía. Mientras tanto, la Guardia Civil investigaba las circunstancias que llevaron al vuelco del camión, que se produjo en un tramo que no suele registrar incidentes de esta magnitud.
El tráfico se restableció con el paso de las horas, pero la imagen de la cascada blanca cayendo desde el puente seguirá siendo, para muchos, uno de los momentos más surrealistas vividos en la autovía del Cantábrico.