Ni en Madrid ni en Asturias: esta es la carretera con más curvas de España, no apta para pasajeros que se mareen en el coche
Trazados sinuosos
La GC-200 en Gran Canaria es conocida como la carretera de las 365 curvas
Las 6 mejores carreteras con curvas del mundo en las que soñamos conducir

La carretera con más curvas no está en la península, pero sí en España.
En el corazón de Gran Canaria, lejos del bullicio de Madrid y de las montañosas rutas asturianas, se encuentra la carretera GC-200. Este tramo, que une Agaete con La Aldea de San Nicolás, es célebre por sus innumerables curvas y vistas panorámicas que quitan el aliento. Conocida como la carretera de las 365 curvas, promete una experiencia única para los amantes de la conducción y la aventura.
La GC-200 se extiende a lo largo de aproximadamente 30 kilómetros en la costa occidental de Gran Canaria, tal como apuntan desde una publicación de MOTO Club MAPFRE. Este tramo es famoso por sus acantilados que oscilan entre los 200 y 900 metros de altura, ofreciendo vistas espectaculares del océano Atlántico. Sin embargo, no es una ruta para los débiles de corazón ni para aquellos propensos al mareo, ya que sus curvas cerradas y la ausencia de barreras de seguridad en ciertos tramos la convierten en una de las carreteras más desafiantes de España.
Recorriendo su historia
Un viaje con muchas curvas

Hasta 1970, la GC-200 carecía de vallas protectoras, lo que resultó en numerosos accidentes mortales. Desde la página Tiempo de Canarias recuerdan que más de 40 personas perdieron la vida en esta carretera antes de la instalación de medidas de seguridad. Además, los desprendimientos de rocas eran frecuentes, aumentando la peligrosidad del trayecto.
A pesar de las mejoras implementadas a lo largo de los años, la carretera sigue siendo considerándose peligrosa. Los desprendimientos y las condiciones climáticas adversas pueden provocar cierres temporales, por lo que es esencial consultar el estado de la vía antes de planificar el viaje por ella.
Reformando la infraestructura
Una luz al final del túnel

Conscientes de la peligrosidad y la necesidad de mejorar la conectividad en la isla, las autoridades canarias han trabajado en proyectos para modernizar la GC-200. Uno de los más destacados es la construcción del doble túnel de Faneque, diseñado para ofrecer una alternativa más segura al tramo más arriesgado de la carretera, como indican desde MAPFRE. Se esperaba que este proyecto estuviera finalizado a finales de 2022, lo que cambiaría significativamente la experiencia de viaje en esta ruta.
La apertura de estos túneles ha generado opiniones encontradas. Mientras que muchos celebran la mejora en seguridad y reducción de tiempos de viaje, otros lamentan la pérdida de la esencia aventurera que caracterizaba a la GC-200. La adrenalina de enfrentarse a sus curvas y precipicios era, para algunos conductores y motociclistas, parte fundamental del encanto de la ruta, tal como destacan desde Canarias en Moto.
La GC-200 es más que una simple carretera; es un reflejo de la geografía y la historia de Gran Canaria. Aunque las mejoras en infraestructura buscan garantizar la seguridad de residentes y visitantes, la esencia de esta ruta tan serpenteante perdurará en la memoria de quienes la recorran.