El microcoche eléctrico español que soluciona los problemas de estacionamiento: “Donde cabe un coche, aparcan cuatro Nenos”
Movilidad urbana
La startup Mobme, del grupo gallego de automoción Castrosua, presenta un biplaza urbano, compacto y sostenible pensado para revolucionar la movilidad en la ciudad
Citroën Ami Buggy, la versión playera más “cañera” que atraerá todas las miradas y se puede conducir sin el carnet de coche

Las compactas dimensiones del Neno facilitan el estacionamiento incluso en los huecos más complicados

España es uno de los grandes productores mundiales de vehículos, con marcas como Seat o Cupra, y una industria que incluye tanto gigantes del sector como numerosas firmas menos conocidas. Entre estas últimas, Castrosua destaca por su larga trayectoria en la fabricación de carrocerías para autobuses y autocares, un negocio que lleva casi 75 años desarrollando con éxito, aunque hasta ahora no se le conocía ningún coche propio.
En los últimos años, la compañía gallega ha dado un paso más allá y ha entrado en el emergente segmento de la movilidad urbana con la startup Mobme. Su primer proyecto es Neno, un microcoche 100% eléctrico que pretende revolucionar los desplazamientos en ciudad. Con unas dimensiones realmente contenidas, Neno ofrece dos plazas en paralelo y una capacidad de carga superior a 180 litros en su versión de pasajeros.

Este vehículo compacto nace para responder a dos problemas acuciantes de la movilidad urbana. Por un lado, la falta de espacio y, por otro, el exceso de contaminación. Precisamente, sus diminutas dimensiones -menos de dos metros cuadrados de superficie- permiten aprovechar al máximo el espacio disponible. “Donde cabe un coche, aparcan cuatro Nenos”, señala la empresa, que busca así descongestionar las calles y facilitar el aparcamiento en zonas cada vez más saturadas.
El coche mide menos de 2 metros cuadrados y tiene capacidad para dos personas y 180 litros de carga
En cuanto al impacto ambiental, al tratarse de un modelo 100% eléctrico, no emite gases contaminantes y contribuye a reducir el ruido y la huella de carbono en los núcleos urbanos.
Con una longitud de apenas 1,75 m, una anchura de 1,10 m y un peso que ronda los 500 kilos, el Neno se sitúa en la categoría L7e de vehículos ligeros eléctricos (cuadriciclos pesados), lo que lo convierte en una opción especialmente ágil para moverse por calles estrechas y sortear atascos. Puede conducirse con el carnet AM, a partir de los 15 años, o con el carnet de coche tipo B. Sus dimensiones y maniobrabilidad lo hacen ideal para trayectos cortos, repartos de última milla o servicios compartidos.
Al pertenecer a la categoría de los cuadriciclos ligeros, el Neno puede conducirse desde los 15 años con carnet AM
El vehículo tiene un diseño funcional pero con una estética muy marcada. Las líneas son sencillas, casi minimalistas, pero incluyen detalles que aportan personalidad. En el interior, el enfoque es igual de práctico, con espacio suficiente para que dos adultos viajen cómodamente. También incorpora conectividad móvil y opciones de geolocalización para facilitar su uso en flotas o aplicaciones de carsharing.

La producción del Neno está pensada para fabricarse íntegramente en Galicia, combinando la experiencia industrial de Castrosua con la flexibilidad de una startup tecnológica.
Más allá de su tamaño o su diseño, Neno quiere demostrar que también desde pequeñas iniciativas locales pueden nacer ideas capaces de transformar la movilidad. En palabras de sus creadores, se trata de “un vehículo pensado para las ciudades del presente, pero con visión de futuro”.