Más allá de la inflación y las innovaciones tecnológicas: un estudio revela qué hay también detrás de la subida récord en los precios de los coches
Mercado europeo
La ONG francesa Institut Mobilités en Transition alerta del aumento del 56% en los márgenes de beneficio por coche vendido
Estos son los coches más baratos del mercado según su motor: gasolina, diésel, híbrido, híbrido enchufable, eléctrico y de gas

Los responsables de la subida de precio de los coches nuevos son las propias marcas, según un estudio realizado en Francia

Comprar un coche nuevo nunca ha sido tan caro como ahora. Aunque el mercado ofrece fórmulas como la financiación o el renting para aliviar el golpe, la realidad es que los precios han subido un 24% desde 2020 en Europa, un porcentaje sin precedentes. Si retrocedemos en el tiempo y ponemos el foco en España, el precio medio de los 10 coches más vendidos en 2024 en nuestro país ha sido un 65% más elevado que en 2014, según un estudio de AutoScout24, con datos de Ideauto y de la Dirección General de Tráfico.
El caso del Renault Clio lo ilustra bien. En 2014, la versión más básica de este modelo urbano rondaba los 10.000 euros. Hoy, su precio parte de 17.500 euros, y eso sin tener en cuenta extras ni opciones de financiación. Es un salto de casi el 75 % en una década.

En paralelo, el número de coches vendidos ha descendido notablemente. Según datos de IDEA, la asociación europea de fabricantes de automóviles, las ventas de vehículos nuevos en Europa han caído alrededor de un 30% desde 2019, pasando de 15,3 millones de matriculaciones en 2019 a 10,6 millones en 2024. Una tendencia que se ha acelerado desde la pandemia y que refleja el impacto de la subida de precios y otros factores del mercado.
Si bien es cierto que la normativa comunitaria ha obligado a incluir sistemas avanzados de asistencia a la conducción (ADAS) y otras tecnologías para cumplir con los estándares de seguridad y emisiones -algo que ha encarecido el precio final de los vehículos-, no todo el aumento puede atribuirse a estos factores. Tampoco a la electrificación ni al papel de China en la cadena de suministro.
Según señala un informe reciente, una parte importante del encarecimiento responde a decisiones internas de los propios fabricantes, que han optado por elevar precios para reforzar su rentabilidad, incluso a costa de vender menos unidades.
Las ventas de coches nuevos en Europa han caído un 30 % desde 2019, mientras los precios siguen subiendo sin freno
Esa es, al menos, la principal conclusión de un estudio publicado por la ONG francesa Institut Mobilités en Transition, que ha analizado los datos de ingresos y ventas de los principales fabricantes europeos entre 2019 y 2023. Según sus cálculos, los márgenes de beneficio por coche vendido han crecido un 56 % en ese periodo, al pasar de 1.800 euros por vehículo a 2.800 euros de media.

En lugar de repercutir únicamente los costes derivados de la transición ecológica o del contexto internacional, las marcas han apostado por una estrategia de subida de precios centrada en los modelos más rentables, renunciando en parte a los segmentos más asequibles. De hecho, el informe concluye que los fabricantes han logrado mantener -e incluso aumentar- sus beneficios a pesar de vender menos coches, gracias a una oferta enfocada en versiones de gama alta.
Los fabricantes prefieren vender menos unidades, pero con mayores márgenes, apostando por modelos de gama alta y más caros
“El aumento de los precios no se explica solo por los costes adicionales ligados a las normativas europeas o a la electrificación. Las marcas han decidido aumentar sus beneficios por unidad vendida en lugar de mantener precios más accesibles”, explica el documento.
Esta estrategia, según la ONG, tiene un efecto directo sobre el acceso al coche nuevo para una parte creciente de la población, que queda excluida del mercado por el aumento de precios, lo que a su vez frena la renovación del parque móvil y complica los objetivos climáticos de la Unión Europea. En España, por ejemplo, la edad media del parque automovilístico es ya de 14,5 años.

El estudio, centrado en Francia pero extrapolable a otros países europeos como España, analiza el incremento del 24 % en el precio de los coches nuevos desde 2019 y desglosa los factores detrás de esta subida. Según el informe, solo un 6 % puede atribuirse a la inflación general -costes laborales o encarecimiento de materias primas-, mientras que no se ha podido aislar el impacto exacto de las exigencias normativas, como la entrada en vigor del estándar Euro 6d o la obligatoriedad de los sistemas ADAS.
Lo que sí ha podido cuantificar el estudio es el peso de las decisiones comerciales de las marcas. Al menos la mitad del aumento del precio -un 12 % del total- se debe a dos estrategias claras: el desplazamiento hacia versiones más equipadas y caras (8 %) y el ejercicio del llamado pricing power (4 %), es decir, la capacidad de fijar precios más altos sin perder clientes.
“El grueso del encarecimiento responde a movimientos deliberados de los fabricantes, que han optado por vender menos coches pero más caros, priorizando el margen por unidad sobre el volumen de ventas”, concluyen los autores. Una estrategia que, aunque se intuye rentable a corto plazo, pone en duda el acceso real al coche nuevo para una parte cada vez mayor de la población.