El bajo caudal del Danubio dificulta la navegación en Hungría
Sequía fluvial
Los buques de carga solo pueden operar entre el 30 y 40% de su capacidad, lo que podría aumentar el precio de las tarifas de transporte
El nivel del agua del río Danubio es inusualmente bajo debido a un largo período de sequía.
Los niveles inusualmente bajos del caudal del Danubio —el segundo río más largo de Europa y una de las rutas de transporte más importante del continente— están afectando a la navegación, a la agricultura y a los ecosistemas húngaros, que sufren las consecuencias de la sequía estival que sacude Europa.
Attila Bencsik, vicepresidente de la Asociación Húngara de Transporte Marítimo, señala que a consecuencia del bajo nivel del agua, los buques de carga deben prescindir de más de la mitad de su carga, solo pudiendo operar al 30-40% de su capacidad.
Por ello, las tarifas de transporte podrían aumentar hasta un 100%, ya que se añade un recargo cuando un barco no puede navegar totalmente cargado, dijo Bencsik.
Bancos de arena que emergen del agua debido al bajo nivel del caudal del Danubio.
Tal como indica Attila Szegi, portavoz de la Dirección General de Gestión del Agua de Hungría, el bajo nivel de las aguas del Danubio no es inaudito, pero suele producirse en agosto.
Las temperaturas alcanzaron un máximo de 35 grados centígrados en Budapest esta semana, mientras gran parte de Europa se abrasaba en una ola de calor que se ha relacionado con la muerte de al menos ocho personas en todo el continente.
El Danubio no es el único río que sufre las consecuencias del calor: en Polonia, el río Vístula alcanzó un nivel mínimo sin precedentes, y el Rin alemán también registró un nivel inusualmente bajo.
Según Szegi, se esperan lluvias en la cuenca del Danubio la próxima semana, lo que debería provocar una ligera subida del nivel del agua y una mejora de la situación de la navegación.