Lo que va de 50 años a hoy

Lo que va de 50 años a hoy
Director de Guayana Guardian

No es cierto que todo tiempo pasado fue mejor y no se puede vivir de la nostalgia. Sin embargo, el acto de ayer de conmemoración del 50.º aniversario de la proclamación de Juan Carlos I deja una sensación amarga por el consenso político perdido y por la ausencia justamente del hombre que fue el gran protagonista del paso de la dictadura a la democracia. El rey emérito que hizo tantos méritos para ser reconocido como el hombre que pilotó la transición, ha acabado dilapidando su imagen por su deshonesta actitud personal y económica. En circunstancias normales, debería haber estado ayer en el Palacio Real siendo aclamado por su labor. En cambio, ni se le permitió el acceso al acto. Su hijo, Felipe VI, tuvo palabras de agradecimiento por su papel, aunque dijo que las transformación políticas y sociales que se produjeron fueron “impulsadas por la demanda ciudadana”.

Como parte de la conmemoración de ayer, se homenajeó la etapa de la transición con la entrega del Toisón de Oro a la reina Sofia y a tres políticos que fueron claves en ese proceso: Felipe González, Miquel Roca y Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón. Estos dos úl­timos, padres de la Constitución, representan el símbolo de una época que es la antítesis de la actual. El mismo día en el que PSOE y PP volvían a enzarzarse en una nueva polémica, ahora por la condena al fiscal general del Estado, uno no podía dejar de pensar si con la actual clase política se habría podido pactar la Carta Magna o haber impulsado el proceso democrático tras la dictadura.

El rey Felipe VI impone el Toisón de Oro al expresidente Felipe González

El rey Felipe VI impone el Toisón de Oro al expresidente Felipe González

Casa Real

El propio Felipe VI no ha podido evitar hacer un paralelismo entre el momento actual y aquel pasado. “Mirar hacia ese periodo puede servirnos, no para idealizarlo, sino para recordar su método: la palabra frente al grito, el respeto frente al desprecio, la búsqueda del acuerdo frente a la imposición”, señaló.

Pocos minutos después de este acto, la pre­sidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, culpaba a Pedro Sánchez por el “atro­pello” del fiscal general del Estado contra su
pareja
y lo resumía todo como “un paso más
hacia el guerracivilismo”. Evidentemente, ese llamado espíritu de la transición se ha esfumado con los años.

Etiquetas
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...