Acabo de finalizar la encuesta del INE. Dieciséis páginas en que preguntan de todo: ingresos, datos de mi casa, que si gas, cuántos electrodomésticos, qué tipo de energía en la cocina, que si coche o moto... Incluso datos de mis padres, ya fallecidos, como qué estudios tenían. Y un largo etcétera. Me ha parecido un atropello, máxime cuando avisaron que contestar era de obligado cumplimiento.
Emilio Marfà Vilanova
Suscriptor Valldoreix
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