La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal dedicada al tráfico de armas a grupos de narcotraficantes, con base en Murcia y ramificaciones en el sur de España. En la operación han sido detenidas 18 personas e imputadas otras seis tras realizar 16 registros en Murcia, Alicante y Cádiz.
Según informó este jueves el Instituto Armado, la organización desviaba armas del mercado legal al ilegal mediante testaferros que denunciaban falsamente su robo o pérdida. Posteriormente, las subministraban a organizaciones de narcotráfico que las utilizaban en la custodia de almacenes y plantaciones de marihuana.
La investigación permitió identificar que la organización criminal que financiaba la compra de las armas estaba asentada en la localidad murciana de Alguazas. Varios de sus integrantes contaban con antecedentes por tráfico de armas y drogas, e incluso por tentativa de homicidio con arma de fuego.
Conexiones con Granada
Las pesquisas condujeron a los agentes hasta otro grupo dedicado al tráfico de armas en Granada, donde se intervinieron una docena de armas, incluidas algunas de guerra. La mayoría estaban enterradas en un descampado que contaba con una galería de tiro subterránea para probarlas.
Ambas organizaciones se abastecían mutuamente para satisfacer las necesidades de sus clientes, principalmente grupos dedicados al narcotráfico. Entre el arsenal que suministraban había fusiles AK47, escopetas y rifles tácticos, así como pistolas de última generación.
La red murciana también se dedicaba al cultivo y distribución mayorista de marihuana, controlando varias plantaciones indoor mediante cámaras de videovigilancia para detectar posibles vigilancias policiales.
Imágen de una de las plantaciones de marihuana.
Los investigadores descubrieron además que la organización se dedicaba a extorsionar a personas que habían solicitado préstamos con elevados intereses, coaccionándolas para recuperar el dinero o bienes inmuebles.
Para blanquear los beneficios obtenidos, adquirían propiedades y vehículos de lujo que registraban a nombre de terceros o empresas pantalla. En uno de los registros se intervinieron más de 170.000 euros en efectivo.
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La operación ha permitido desmantelar cinco plantaciones indoor de marihuana con todo su equipamiento técnico, incluyendo 168 lámparas led y diversos sistemas de climatización y ventilación.
En total, los agentes se han incautado de 11 armas de fuego, casi 900 cartuchos, un silenciador, 173.500 euros en metálico, más de 1.700 plantas de marihuana, cocaína y varios vehículos de lujo.