“Durante el primer semestre de 2025”. Este es el plazo que fija el pacto de investidura entre el PSC y ERC para formalizar el acuerdo sobre la financiación singular de Catalunya “en la comisión bilateral entre el gobierno de la Generalitat y el del Estado”. Un precepto que no se cumplirá de manera estricta, puesto que el límite del 30 de junio se verá superado, según advierten fuentes del Ejecutivo central, del catalán y de ERC.
Está previsto que sea en julio cuando se formalice el acuerdo entre gobiernos, por lo que la demora sería de apenas unos días. De esta forma, el Govern de la Generalitat podrá iniciar el nuevo curso político, tras las vacaciones de verano, con las negociaciones para los próximos presupuestos autonómicos.
Fue el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, quien dio la primera pista sobre esta demora, en una entrevista con La Vanguardia , publicada el pasado lunes. Preguntado por esta cuestión deslizó que “en ocasiones se exige un poco más de tiempo, un poco más de plazo”, pero remarcó la buena marcha de las negociaciones, un extremo que confirman en el Departament d’Economia que dirige Alícia Romero.
El Govern busca la fórmula para tener mayoría en la nueva sociedad, que será una filial de Renfe
El president Salvador Illa remarcó ayer que cumplirá los acuerdos “con los términos y los hitos que nos marcamos”, si bien admitió que en una negociación tan “relevante y compleja” hay “momentos de todo tipo”. Y el portavoz de ERC, Isaac Albert, confirmó también ayer en una entrevista la “ralentización” de las negociaciones, apuntando directamente a la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero. En Economia no ocultan las reticencias de la ministra pero remarcan que la negociación ha ido bien hasta la fecha y que, si se trata de que este acuerdo no repercuta en sus aspiraciones electorales en Andalucía, donde está previsto que se presente como candidata el año que viene, sería conveniente no demorar el acuerdo.
En el Govern apuntan al mes de julio, sin determinar fecha exacta, como el plazo en el que cristalizará el acuerdo entre gobiernos para que Catalunya recaude todos los impuestos y disponga de un modelo de financiación propio y con una contribución solidaria a la caja común. Aseguran que ERC está al corriente de todo, a través de contactos semanales y de la presencia de una representante republicana en la comisión de expertos designada para dar forma al modelo de financiación. Por tanto, enmarcan las quejas del portavoz de ERC dentro de lo previsible, sin más consecuencias.
Albert señaló ayer que “hay trabajo hecho, cosas que se podrían explicar, muy vinculadas a la Agència Tributària”, pero rechazó “participar de un anuncio vacío de contenido para cumplir un plazo o para quedar bien”.
El pacto sobre entre los Ejecutivos central y catalán superará el plazo del 30 de junio y se formalizará en julio
Aún quedará por ver cómo se presentará este acuerdo, para el que será necesaria la convocatoria de una nueva comisión bilateral. En Economia dan por hecho que ERC exigirá protagonismo.
Para compensar esta demora, el Govern tiene previsto dar cancha a los republicanos en otros asuntos, que le servirán para lucir los réditos de la alianza con Illa. El modelo de gobernanza para el aeropuerto de El Prat y el inminente acuerdo para la formalización de la empresa mixta que se hará cargo de Rodalies en Catalunya serán dos asuntos en los que ERC podrá justificar ante propios y extraños la entente con los socialistas.
Los borradores con los estatutos de la empresa mixta de Rodalies hace meses que circulan entre el departamento de Territori y los republicanos. El objetivo de ambas partes es presentarlos públicamente la última semana de junio para seguir dando pasos adelante. En el horizonte, el 1 de enero del año que viene como fecha en la que se podrían asumir algunas competencias como una parte de la línea del Maresme.
El retraso no agrada a ERC, pero lo prefiere a participar de un “anuncio vacío de contenido”
Aún así, el redactado de los estatutos está siendo una tarea de alta complejidad. Las dificultades vienen derivadas del acuerdo de desconvocatoria de huelga firmado con los sindicatos de maquinistas, donde se establece que la nueva empresa mixta será una filial integrada dentro del grupo Renfe.
La Generalitat ha recurrido a servicios externos de asesoría jurídica para dar con la fórmula que les permita tener mayoría en la futura sociedad mercantil aunque sea Renfe quien tenga el 51% del capital social de la empresa mixta. Es un escenario con el que experimentadas fuentes de la administración reconocen no haberse encontrado nunca. Más fácil parece la selección de los miembros del consejo de administración, que será paritario, con un presidente nombrado a propuesta del Govern y para el que ya se barajan diversos nombres.
