Isabel Díaz Ayuso ha inaugurado este jueves el Debate sobre el estado de la región con un discurso de marcado tono político en el que ha esquivado cualquier referencia al proceso judicial que afecta a su pareja, Alberto González Amador. La presidenta madrileña ha preferido centrarse en defender “la Madrid próspera y libre” que dirige frente a lo que considera una amenaza para toda España: “la implantación del cupo catalán, la condonación de la deuda y la creación, por la puerta de atrás, de una Hacienda catalana”. Todo ello, ha dicho, constituye “una doble trampa fiscal a la que nos somete Sánchez a costa de la unidad de España”.
La dirigente popular ha entrado en la Asamblea arropada por los 70 diputados de su grupo, que le garantizan la mayoría absoluta, y acompañada por el secretario general del PP, Miguel Tellado. Lo ha hecho, sin embargo, entre las demandas de dimisión lanzadas por PSOE y Más Madrid tras la filtración de la declaración judicial de la jefa de la inspección tributaria en Madrid, Mercedes Urbano, sobre los presuntos delitos fiscales cometidos por González Amador.
En esa comparecencia ante la jueza, celebrada en marzo y adelantada por la Cadena Ser, Urbano describe cómo se detectaron quince facturas falsas elaboradas por cuatro empresarios para González, por un valor conjunto de 1,7 millones de euros, con el único objetivo de defraudar de forma consciente a Hacienda en los ejercicios de 2020 y 2021. La contundencia de su testimonio, según fuentes jurídicas, dejó al empresario “a un paso” del banquillo. “Como tenía muchos beneficios hizo facturas falsas”, declararon las técnicas del Ministerio.
Ayuso, no obstante, ha optado por desentenderse de lo que su entorno califica como “ruido y matraca” para reivindicar los avances logrados por su Gobierno y marcar el rumbo político de los próximos años. Han sido fuentes cercanas a la presidenta quienes se han encargado de denunciar la “doble vara de medir del Partido Socialista”, recordando que se ha exigido su dimisión por una causa “que no tiene nada que ver con ella”, mientras no se cuestiona al presidente Pedro Sánchez pese a que su esposa, Begoña Gómez, ha admitido haber utilizado a una asesora “pagada con fondos públicos”.

Miguel Tellado (i), ha acompañado a Ayuso en la Asamblea de Madrid
En su intervención, Ayuso ha vuelto a situar la confrontación con Catalunya como un eje central de su discurso, reafirmando su intención de liderar la resistencia del PP frente a los acuerdos del Gobierno con el independentismo. Ha tildado el cupo catalán como “el comienzo del fin de la Hacienda nacional” en favor de una ficticia “Hacienda catalana” que, en su opinión, pondrá en bandeja a los independentistas “los medios para el siguiente y definitivo golpe de Estado”.
La presidenta ha denunciado además una “conexión perversa” entre el cupo catalán y la condonación de la deuda. “Primero se absorbe una parte importante de la deuda autonómica por parte de la Administración General del Estado, y acto seguido se saca a Catalunya del régimen común de financiación”, ha sostenido. “Todo esto, mientras quieren acabar con la legítima autonomía fiscal de la Comunidad de Madrid, que pone en evidencia su desastrosa gestión ideológica”.
Por todo ello, ha anunciado que encomendará a su grupo parlamentario la tarea de evaluar y difundir el coste “real y concreto” de estas medidas para Madrid. “Detallaremos cuántas becas, cuántas plazas de dependencia, cuántos médicos o profesores quedan comprometidos”, ha prometido, antes de resumir que el socialismo y el independentismo buscan una “mutación constitucional” que ella se ha comprometido a frenar desde la Puerta del Sol.
50 medidas: vivienda, fiscalidad y salud
En el debate sobre el estado de la región, Isabel Díaz Ayuso anunció un paquete de medidas que abarcan desde la economía hasta la protección social y la salud. Entre las iniciativas destacadas se encuentra un plan de choque para la vivienda, que contempla una nueva ley del suelo para ampliar la oferta de vivienda protegida con menos trámites, así como la creación de distritos industriales especializados para reforzar el liderazgo económico de la Comunidad de Madrid.
En el ámbito familiar y social, la presidenta anunció una nueva ley para considerar al concebido no nacido como miembro de la familia y la apertura de un piso público destinado a menores embarazadas sin apoyo familiar. En materia de salud, se pondrá en marcha un programa de cribado neonatal de cardiopatías congénitas críticas en todas las maternidades para detectar a tiempo patologías graves del corazón en los recién nacidos. Además, Ayuso presentó una Ley de Apoyo a la Empresa Familiar que busca impulsar la creación, modernización y consolidación de más de 450.000 compañías, que representan el 93% del tejido empresarial y generan el 60% del empleo privado, incluyendo deducciones fiscales y nuevas normas sobre participación accionarial.
Entre las medidas económicas también se incluyen rebajas fiscales para comercios históricos y hosteleros con más de 50 años de actividad, así como ayudas a autónomos sénior mediante la ampliación de la 'Tarifa Cero', que permitirá recibir hasta 480 euros al mes a quienes inicien actividad profesional con ingresos inferiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional.