El calendario fijado este lunes por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para presentar una propuesta completa sobre la reforma del modelo de financiación, situando el mes de enero o de febrero como fecha más probable para ello, tendrá consecuencias para la legislatura catalana. La negociación de los nuevos presupuestos de la Generalitat, que el Govern de Salvador Illa quisiera tener listos “lo antes posible”, quedarán en barbecho al menos hasta que se cierre el acuerdo sobre la financiación singular de Catalunya, algo que los socialistas y republicanos señalan para finales de año.
Aunque la consellera portavoz del Govern, Sílvia Paneque, ha evitado por todos los medios señalar un calendario aproximado, ha remarcado que la voluntad del Ejecutivo catalán es disponer de unos presupuestos “a principios de año”, una vaguedad que permite al Ejecutivo catalán curarse en salud ante futuros acontecimientos.
“A principios de año esperamos poder tener estos presupuestos y trabajamos intensamente para que sea posible”, ha señalado Paneque antes de recordar que es ERC, el socio de investidura con el que -junto a los Comuns- se quieren negociar estos presupuestos, “fijaba la financiación como elemento estructural de la negociación y el Govern sigue con la voluntad de tenerlos lo antes posible”.
“A principios de año esperamos poder tener estos presupuestos y trabajamos intensamente para que sea posible”
El calendario presupuestario del Govern está vinculado con los avances que se vayan produciendo en materia de financiación. ERC exigió de inicio “avances significativos” en esta materia, lo que se traduce en un acuerdo bilateral entre el Ejecutivo catalán y el Ministerio de Hacienda en los términos fijados en el pacto de investidura entre el PSC y ERC. Este lunes, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) “se dio un primer paso” que el Govern ha aplaudido, tanto por lo que supone políticamente como en los términos en que se mueve la reforma.
En el primer plano, Paneque ha valorado el hecho de que por primera vez en 11 años se ha puesto sobre la mesa un “debate riguroso” sobre la reforma del modelo de financiación autonómica, aunque esto suponga tener que esperar más de la cuenta para aprobar los nuevos presupuestos con los aliados de investidura, puesto que las negociaciones “aún no se han iniciado”, ha constatado la portavoz.
El Govern cree que Catalunya podría recibir hasta 5.000 millones más con nueva financiación
En cuanto a la arquitectura de la reforma que presentó este lunes Montero, en el Ejecutivo catalán cunde el optimismo, como ha evidenciado la consellera de Economia, Alícia Romero, en una entrevista en TV3, donde se vanaglorió por el resultado del CPFF y la iniciativa de Hacienda, hasta el punto de poner cifras a la mejora que el nuevo modelo supondría para Catalunya: hasta 5.000 millones de euros más.
Romero ha asegurado que Catalunya podría recibir entre 3.800 y 5.000 millones de euros más con el nuevo modelo de financiación autonómica y se ha mostrado convencida de que incluirá los principios de ordinalidad y suficiencia financiera. Si el nuevo modelo acaba aportando una cantidad global de entre 17.000 y 20.000 millones, como apuntan algunos economistas, “estaríamos entre los 3.800 y los 5.000 millones para Catalunya”, aunque “habrá que ver la población ajustada”, un criterio “muy importante”, ha apuntado la consellera, para determinar el montante final.
El “ruido político” del PP
Aun así, Romero ha asegurado que si el nuevo modelo de financiación mejora la cifra global de financiación para todas las autonomías en entre 17.000 y 18.000 millones de euros “estaríamos satisfechos”, pero se ha mostrado partidaria, como lo es Hacienda, de poner coto a la competencia fiscal entre territorios, en clara referencia a comunidades como Madrid o Andalucía, que siguen una política de reducción o eliminación de impuestos. Romero ha abogado por fijar un límite a la bajada de impuestos para evitar la “competencia desleal” e incluso ha asegurado que vería bien que éstas fueran “penalizadas” por ello.
Conscientes del contexto político actual, en el que empiezan a proliferar las citas electorales (al menos en Extremadura y Andalucía), desde el Govern también han lanzado un mensaje al PP para que dejen de lado el interés partidista y se avengan a mejorar el sistema de financiación. Romero ha pedido “ser pragmáticos y dejar el politiqueo” para “pensar en nuestra gente y en nuestro territorio”. A su juicio, “ayer se abrió una oportunidad”. Y Paneque también ha asegurado que “la mejora de la financiación es una cuestión que finalmente irá en beneficio de todas las comunidades autónomas”, por lo que ha pedido “al PP que se centre en lo beneficioso que puede resultar para los ciudadanos de sus territorios y no hacer hincapié en el ruido político”. La portavoz ha insistido en que “la financiación de Catalunya no va en detrimento de otras comunidades autónomas”.


